La gran batalla del Este

Garfield y Roosevelt disputan hoy su Clásico y algo más: el pasaporte a los playoffs

Lorenzo Hernández tiene un compromiso que cumplir, de no hacerlo, es probable que hoy en la noche no duerma en su casa.

Para lograr su objetivo, el coach de la preparatoria Garfield tendrá que salir vencedor de una añeja rivalidad que inicia en la Calle Indiana, justo en el corazón del Este de Los Ángeles.

“La presión es fuerte”, admitió Hernández.

Al oeste de la calle Indiana se encuentra la preparatoria Garfield, al este se ubican las instalaciones de la de Roosevelt.

Los alumnos que asisten a a estos dos centros de estudio fueron en alguna ocasión compañeros de una misma escuela y compartieron un mismo salón de clases de primaria o secundaria.

Recibieron las mismas materias, los mismos maestros, las mismas tareas, pero, a cierta edad, los jóvenes de la calle Indiana tienen que elegir entre el código postal 90022 o el 90033.

O lo que es lo mismo, cruzar al oeste o ir hacia el este.

¿Roosevelt o Garfield?, es ahí donde comienza la historia de una rivalidad deportiva sin parangón.

Los jóvenes que alguna vez fueron grandes amigos, son ahora combatientes dentro del emparrillado.

Los jugadores de los equipos de futbol americano de cada preparatoria defienden los colores de sus instituciones con el cuerpo y con el alma.

Hoy se efectuará la edición número 77 del partido entre estas dos escuelas que se han convertido en bastión de la educación de la comunidad latina de Los Ángeles.

“Hace muchos años a este partido se le llamaba el ‘Chilli Bowl’ o el ‘Taco Bowl’, cada año alguien salía con una palabra nueva para nombrar este juego”, comentó el entrenador en jefe de la Roosevelt, Javier Cid.

En vista de la gran animación que despertaba este duelo, y la expectación que se creaba alrededor del mismo, en 1972 se creó una comisión para bautizar formalmente el evento.

“Fue así que nació el nombre del ‘Clásico del Este de Los Ángeles’, explicó Cid, quien está en su séptima temporada al frente de la escuadra de Roosevelt.

Este choque deportivo se ha convertido en un símbolo de unidad entre la comunidad.

Previo al partido se llevan a cabo diversos eventos que desembocan en el estadio de futbol donde se efectúa el choque entre ambas escuadras.

Además de esto, el juego significa la bienvenida que cada escuela brinda a todos sus exalumnos.

En ninguna ciudad de California dos escuelas celebran la bienvenida de sus exalumnos el mismo día.

“Garfield y Roosevelt sí lo hacen, es por eso que el ambiente en el estadio es algo sin igual” explicó Hernández, quien lleva 11 temporadas como entrenador en jefe de la escuadra de Garfield.

“La gente hace sus planes de vacaciones alrededor de la fecha del partido, los exalumnos se quieren encontrar para saludarse, para verse, para saber de ellos”, comentó.

La multitud que acude a este juego ha obligado a que se lleve a cabo en el estadio Wingart del Colegio del Este de Los Ángeles, con capacidad para 25 mil espectadores.

“Es algo muy grande, jugar ante tanta gente es algo que muy pocos estudiantes de preparatoria pueden experimentar”, dijo Cid.

La gran diferencia del juego de hoy y de el de ediciones pasadas es que en esta ocasión el resultado incide directamente en la tabla de posiciones.

Ésta es la primera temporada en la que el equipo de Roosevelt milita dentro de la misma Liga que el de la Garfield, y al estar en el mismo grupo, el equipo que salga hoy con el triunfo se enfilaría a los playoffs, mientras que el que pierda se estaría despidiendo prácticamente de la postemporada.

La presión es muy grande, tanto así que Lorenzo Hernández ya sabe lo que le espera si pierde.

“Si no gano, mi esposa ya me dijo que no voy a poder entrar a dormir a la casa”, comentó entre risas.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain