Se podría detectar cáncer en análisis de sangre
El análisis serviría para localizar diferentes tipos de cáncer a través de biomarcadores y sustituiría a las biopsias
Bilbao, España.- El biólogo británico y experto en investigación oncológica Charles Lawrie aseguró hoy que dentro de tres años se podrá detectar el cáncer mediante un análisis de sangre.
El análisis serviría para localizar diferentes tipos de cáncer a través de biomarcadores y sustituiría a las biopsias, que son pruebas diagnósticas que entrañan riesgos para el paciente, son caras y, además, precisan de patólogos expertos para interpretarlas.
En un encuentro con los medios de comunicación en la ciudad española de Bilbao (norte), Lawrie explicó que en los últimos años se ha especializado en el estudio de unos biomarcadores denominados “microRNA”, un término acuñado hace una década para describir una molécula de ácido ribonucleico.
Lawrie procede de la Universidad de Oxford, donde se doctoró en Ciencias Biológicas, y se incorporó hace un año al Instituto Biodonostia como director de Investigaciones Oncológicas en el marco del programa de captación de talentos de la Fundación Vasca de Ciencia-Ikesbasque.
Los “microRNA” están presentes en una gota de sangre y “en teoría”, según precisó el biólogo, podrían indicar la presencia del cáncer.
El investigador indicó que su área de trabajo está centrada en los linfomas, aunque el diagnóstico en sangre podría utilizarse para otros cánceres y otras enfermedades.
Por el momento, esta posibilidad se encuentra en fase de investigación, pero Lawrie avanzó que se podría aplicar en tres años.
Sobre los tratamientos para combatir el cáncer afirmó que el futuro pasa por las terapias individualizadas, ya que los actuales se establecen por patologías y funcionan con algunos pacientes, pero con otros no.
Para llegar a los tratamientos personalizados y ajustar a cada enfermo la medicación que necesite, se debe extraer la secuencia del genoma de cada paciente, una prueba cuyo coste aún es muy caro, pero que se espera rebajar “muy pronto” a los 1,000 dólares.
“Hace dos años costaba entre 20,000 y 50,000 dólares y ahora se sitúa en 2,000 ó 3,000”, indicó el biólogo.
Respecto a la incidencia de la crisis económica en la financiación de la investigación, Lawrie dijo que “se nota demasiado” y recordó que el desinterés en invertir dinero en este ámbito se debe a que los resultados “tardan en llegar”. EFE