Clima ya favorece a los bomberos
Cuadrillas siguen en pie de lucha en el Oeste del país
CHEYENNE, Wyoming.- Bomberos del Oeste aprovecharon la mejora del clima de ayer para lograr avances contra los incendios que destruyeron hogares, obligaron a realizar evacuaciones y quemaron cientos de miles de acres de bosques y malezas.
En Redding, California, un incendio en aumento amenazaba a decenas de viviendas. A menos de un día de haberse descubierto, el fuego se extendió a unas 2 millas cuadradas.
“Aunque no hay vientos ni temperaturas extremas, este incendio se desató por las condiciones sumamente secas”, dijo Daniel Berlant, portavoz del Departamento de Forestación y Protección contra Incendios de California. “Eso es preocupante porque, aunque no tengamos condiciones máximas de incendio, igual las llamas se propagaron muy rápidamente”.
En Colorado, las cuadrillas esperaban contener al incendio más destructivo del estado. Las autoridades de Colorado Springs dieron orden de evacuación en 126 viviendas por un incendio de 28 millas cuadradas que dañó o destruyó casi 350 hogares y mató a dos personas.
Los funcionarios del servicio médico forense identificaron a las víctimas como William Everett, de 74 años, y su esposa Barbara, de 73. Los registros del centro de comunicación indicaron que el incendio parecía haber comenzado cerca de una popular senda para excursionismo al oeste de Colorado Springs, según informó el diario The Denver Post, aunque se continuaba investigando la causa.
En Wyoming y Montana, un descenso en las temperaturas y el cambio de velocidad en los vientos ayudaron a los bomberos en combatir los incendios. Las temperaturas se ubicaron en los 80 grados al registrarse los niveles más altos de humedad. Y los vientos a baja velocidad ayudaron a las cuadrillas en un incendio de 95 millas cuadradas al noroeste de Newcastle, una ciudad de 3 mil 500 habitantes cerca del noreste de Black Hills en Wyoming. Unas 25 familias fueron evacuadas de las afueras de Newcastle.
En el sureste de Wyoming, algunos aeroplanos, -entre ellos cuatro grandes aviones cistern- ayudaron a contener al 51% un incendio que se esparció por 16 millas cuadradas. Entre los aviones cisterna había dos C-130 militares pertenecientes a una flota que se redujo a siete cuando uno de ellos se estrelló el pasado lunes en Black Hills, Dakota del Sur.
“Para variar, realmente le dimos duro en vez de que el incendio nos golpeara a nosotros”, indicó Larry Helmerick, portavoz en el incendio. Las autoridades pensaban permitir que más personas regresaran a las decenas de cabañas de verano evacuadas cerca de la frontera de Colorado, en el Bosque Nacional Medicine Bow.
Los bomberos también informaron un progreso en el incendio de 145 millas cuadradas alrededor de Laramie Peak, a unas 100 millas del noroeste de Cheyenne.
En la zona sureste de Montana, más de mil 300 bomberos lograron grandes resultados en cinco incendios que las autoridades manejan como un gran incendio esparcido en 480 millas cuadradas, de modo que rápidamente se puedan desplegar recursos.
“Sin prisa, pero sin pausa. Queremos que las líneas se mantengan”, dijo Dixie Dies, agente de información de incendios.
En un incendio de 72 millas cuadradas cerca de Fort Howes, los encargados trabajaban para conectar las líneas de contención cavadas por los residentes.
En Utah, la lluvia y las temperaturas más bajas ayudaron a las cuadrillas a mantener las líneas de combate en un incendio que destruyó 13 millas cuadradas, aproximadamente a unas 30 millas al sureste de Cedar City.
El incendio amenazó a 550 cabañas y casas de verano en el Bosque Nacional Dixie. Cayó un cuarto de pulgada de lluvia en el incendio forestal más grande de Utah, un incendio de 160 millas cuadradas al este de Delta.
El Servicio Nacional de Meteorología anunció que se esperan temperaturas moderadas en Colorado y Wyoming el fin de semana, pero advirtieron que se espera un clima seco y caluroso para Montana.