Tregua ante las llamas

CAMARILLO (AP).— Una masa de aire fría y húmeda que ingresaba al Sur de California el domingo ayudó a los bomberos a levantar líneas de contención alrededor de un enorme incendio forestal que amenazaba con extenderse aún más sobre las montañas de la costa.

Las cuadrillas de bomberos aprovecharon la mejora de las condiciones climáticas cuando la masa de aire caliente y seca y los vientos fuertes que se registraron durante los últimos días fueron reemplazados por el aire normal del Pacífico, lo cual disminuyó drásticamente la actividad del fuego.

Según los bomberos del condado de Ventura, se esperaba que el incendio de 44 millas cuadradas, localizado en el extremo oeste de las Montañas de Santa Mónica, estuviera totalmente sofocado hoy lunes.

El progreso en las labores contra el incendio llevó a que las autoridades levantaran las órdenes de evacuación restantes. “Realmente hemos pasado de combatir el fuego a ser una patrulla de limpieza”, le dijo el jefe de batallón del Departamento de Forestación y Protección contra Incendios de California, Nick Schuler, al diario The Ventura County Star.

Un bombero resultó herido en la zona de Newbury Park cuando luchaba contra el fuego y fue trasladado a un hospital, según el rotativo.

El Servicio Nacional de Meteorología pronosticó un sistema de baja presión con 20% de probabilidad de chubascos ayer, con un aumento de probabilidades durante la noche y para hoy lunes.

Casi 2,000 bomberos trabajaron para acorralar el fuego con máquinas, topadoras y aeroplanos.

Los esfuerzos de los bomberos se concentraron en el lado este del incendio, unos cañones escabrosos que corresponden a una mezcla de tierras públicas y privadas.

Se esperaba que los cambios de las condiciones meteorológicas también trajeran fuertes vientos a algunas partes del Sur de California, pero lejos de la zona del incendio.

A pesar del tamaño y la velocidad con la que crecía el incendio, que se originó el jueves y se desplazó rápidamente a través de distintos vecindarios de Camarillo Springs y Thousand Oaks, éste causó daños a únicamente 15 viviendas, aunque representó una amenaza para miles.

El incendio también se extendió a través del Parque Estatal Point Mugu, una zona de campamento y excursionismo que se extiende entre esas comunidades y el mar. Craig Sap, superintendente del distrito de parques, dijo que se quemaron dos viviendas antiguas, tipo rancho, que no se utilizaban y se encontraban ubicadas en la zona agreste. También sufrieron daños los baños y la zona de campamentos. Sap estimó que el costo de las reparaciones ascendería a 225,000 dólares.

Los residentes agradecidos colgaron carteles para agradecer a los bomberos por salvar sus hogares.

El incendio forestal es uno de los más de 680 incendios que se registraron en el estado en lo que va del año (unos 200 más que el promedio).

Al este de Los Ángeles, en el Condado Riverside, un nuevo incendio que se desató en la tarde del sábado quemó 650 acres de parque natural al sur de Banning. El sábado se encontraba contenido en un 75%. Banning ha sido flanqueada al norte por un incendio de casi 5 millas cuadradas que destruyó una vivienda poco después de haberse iniciado el miércoles. El incendio se encontraba contenido totalmente a última hora del sábado.

En el Norte de California, un incendio que quemó 11 millas cuadradas de parque natural en el Condado Tehama representaba una amenaza para un par de propiedades comerciales cerca de la comunidad de Butte Meadows, según el Departamento de Bomberos de California.

Se esperaba que tormentas eléctricas trajeran vientos erráticos pero poca lluvia en la zona ubicada a 200 millas del norte de San Francisco.

Casi 1,300 bomberos se encontraban en las líneas y el incendio, que comenzó el miércoles, se encontraba dominado en un 40%.