Buscan enderezar crucero
Gobierno italiano da autorización para intentar esa proeza
La nave crucero Costa Concordia yace encallada en la Isla de Giglio, Italia, y a partir de hoy se intentará enderezarla para remolcarla. Crédito: AP
ISLA DE GIGLIO, Italia. Las autoridades italianas dieron la autorización final para que hoy lunes se haga un esfuerzo temerario para enderezar el crucero Concordia, que encalló y quedó inclinado en la costa de la Toscana, una proeza de ingeniería sin precedente que podría terminar con un gran éxito o con un fracaso profundo.
La nave encalló hace 20 meses, pero la agencia nacional de Protección Civil de Italia esperó hasta que se contara con las condiciones meteorológicas y marítimas favorables antes de dar su consentimiento. En una declaración divulgada ayer domingo, la agencia dijo que las condiciones del mar y del viento para la madrugada de hoy lunes estarán “dentro del marco de viabilidad para operar”.
El Concordia chocó con un arrecife cerca de la costa de la isla Giglio la noche del 13 de enero de 2012 y se inundó por un corte de 70 metros (230 pies) en el casco de la nave. Murieron 32 de los 4,200 pasajeros y tripulantes. Los cadáveres de dos de ellos nunca fueron hallados y se supone que podrían estar debajo de los restos del naufragio.
Los ingenieros nunca habían tratado de enderezar una nave de tales proporciones y tan cerca de la costa. Si la operación es un éxito, el Concordia será remolcado y despedazado como metal viejo.
Expertos en salvataje habían esperado inicialmente realizar la tarea a principios de año, a fin de remolcar la nave de 105 mil toneladas métricas (115 mil toneladas), pero tormentas fuertes impidieron el trabajo.
Las cuadrillas especializadas se han apresurado a enderezar al Concordia antes que llegue otra temporada invernal que castigue más al crucero contra el lecho rocoso, lo que empeoraría el daño y aumentaría la posibilidad de que no pueda ser remolcado en una sola pieza.
Un gran número de turistas y residentes nadaron en las cristalinas aguas más allá de la bahía para acercarse a los escombros de fondo, un recuerdo de la terrible noche en que miles de personas trataron de ganar la costa por todos los medios. Desde que el Concordia encalló ha atraído a curiosos. Ha sido un atractivo turístico durante todo el año para la isla, dedicada a la pesca, como nunca había experimentado.
