Advierte por daño a economía

WASHINGTON.— El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, urgió ayer al Congreso a actuar de inmediato para aprobar el presupuesto y a elevar el tope de la deuda, y advirtió que evitará que se dañe la economía de millones de estadunidenses.

“Después de cinco años de esfuerzos para salir de la crisis económica, que casi convirtió una recesión en una depresión, lo último que necesitamos es que Washington fabrique otra”, dijo el mandatario durante su mensaje sabatino.

Criticó las acciones de algunos legisladores republicanos que en su estrategia partidista se han mostrado renuentes a aprobar esas iniciativas vitales para el país.

“Estados Unidos es una nación que paga sus deudas. Somos una nación compasiva. Somos los cimientos de la inversión mundial. Y hacer cualquier cosa que lo amenace es la peor irresponsabilidad posible”, advirtió.

“No permitiré que nadie dañe la reputación de este país o amenace con infligir daños económicos a millones de nuestra propia gente sólo para dejar clara una postura ideológica”, afirmó.

La economía estadunidense está progresando, cinco años después de la peor recesión registrada tras la Gran Depresión, pero para evitar otra crisis, el Congreso debe cumplir con dos plazos límite en las próximas semanas, consideró el mandatario.

Expuso que el primero será aprobar un presupuesto para finales de septiembre a fin de mantener al gobierno funcionando, y el segundo será elevar el tope de la deuda para que Estados Unidos pueda pagar sus deudas.

“El Congreso debe votar ya para lograr estos dos objetivos, de manera que podamos continuar creando nuevos empleos y expandiendo las oportunidades para la clase media”, urgió.

El deber constitucional más básico del Congreso es aprobar el presupuesto, pero si no se aprueba uno antes del 30 de septiembre, el gobierno cerrará, alertó.

“Y el Congreso debe autorizar al Departamento del Tesoro pagar las deudas de Estados Unidos. Esto se hace con un simple voto, normalmente rutinario, para incrementar el tope de la deuda. Desde la década de los años 50, el Congreso siempre lo ha aprobado”, añadió.

Obaman insistió en que si esta legislatura no aprueba el presupuesto en las próximas semanas, Estados Unidos no podrá cumplir con sus obligaciones financieras y pondrá toda la economía en riesgo.

“Pero la reducción de nuestros déficits y de nuestra deuda no es tan siquiera de lo que se trata el enfrentamiento actual con el Congreso, abundó.

Hay facciones en la extrema derecha del lado republicano, señaló, que han convencido a sus líderes de que amenacen con cerrar el gobierno si no pueden derrotar la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio.

Algunos de ellos están dispuestos a hundir a Estados Unidos en el incumplimiento de sus obligaciones financieras, si no pueden bloquear el financiamiento de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, aseguró.

Esos legisladores están dispuestos a sumir de nuevo a este país en una recesión y todo para negarles la seguridad básica de tener cuidado de salud a millones de personas que viven en Estados Unidos, pero ellos saben que no va a pasar, advirtió.

Si el presupuesto de Estados Unidos no es aprobado para el próximo 30 de septiembre, el gobierno federal deberá cerrar servicios no esenciales y miles de empleados del gobierno pasarán al desempleo.