Boston a los pies de Medias Rojas

Mañana desfilarán los campeones de Grandes Ligas

El piloto de Boston, John Farrell, muestra el trofeo a una muchedumbre que hizo vibrar el Fenway  la noche histórica del miércoles pasado.

El piloto de Boston, John Farrell, muestra el trofeo a una muchedumbre que hizo vibrar el Fenway la noche histórica del miércoles pasado. Crédito: EFE

BOSTON (AP).— El desfile para homenajear a los campeones Medias Rojas se realizará por el río Charles en las primeras horas de mañana, según anunció el alcalde Thomas Menino.

“Los ‘patos’ están listos y la ciudad está preparada. Así que a celebrar”, dijo Menino en rueda de prensa.

Como lo han hecho en los últimos desfiles (tercero en 10 años), los nuevos monarcas del beisbol viajarán en los “botes pato” —lanchas anfibias que sirven para trasportar turistas en Boston—, e iniciará dentro del Fenway Park y llegará hasta el Museo de Ciencia.

Allí los homenajeados se embarcarán en los vehículos anfibios para dar la vuelta triunfal por el río Charles que terminará en el mismo museo.

Estas celebraciones fueron posibles gracias a la transformación del equipo por todos sus ángulos.

Desde el primer momento que John Farrell se dirigió sus jugadores al iniciar la pretemporada fue olvidar todo el drama y calamidades de los últimos dos años.

El mensaje de Farrell caló de inmediato.

“Como dije, desde el primer día, el cuerpo no funciona si la mente no funciona. Y nuestro mánager es excepcional”, dijo David Ortiz, el Jugador Más Valioso de la tercera Serie Mundial que se adjudican los Medias Rojas desde 2004.

“Apenas llegamos a Fort Myers, (la sede de pretemporada del equipo en Florida), sabía el libreto de la película, lo único que teníamos que hacer era oprimir el botón de play”, añadió el jardinero Jonny Gomes.

Boston se convirtió en apenas en el segundo equipo en la historia de las Grandes Ligas que se proclama campeón al año siguiente de haber terminado en el último lugar de lugar, calcando lo hecho por los Mellizos de Minnesota en 1991. Su foja de 69-93 dejó un porcentaje de .426.

Ningún club había ganado la Serie Mundial la temporada posterior tras tener un porcentaje tan bajo.

Tonificados por el cambio de timonel y renovada camarería en su camerino, los Medias Rojas acumularon la mayor cantidad de días (158) en la cima de su división en la Liga Americana y encadenaron rachas de más de tres derrotas seguidas por apenas segunda vez en los 113 años de su historia.

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