Navidad trae retenes contra choferes ebrios en LA
Autoridades tendrán retenes de sobriedad y mayor patrullaje para prevenir accidentes y pérdidas de vidas
Si hay retenes, no son de ICE sino de la CHP o el LAPD para, por ejemplo, realizar controles de alcoholemia. Crédito: J. Emilio Flores | La Opinion
Manejar borracho es una práctica muy común en temporada navideña que, por ende, deja un saldo de muerte más alto que en el resto del año en las carreteras de California, alertan agencias del orden.
En la víspera de la festividad, el mensaje es que si va a beber fuera de casa, designe a un conductor sobrio o utilice un taxi.
“Algunos años, las fatalidades y lesiones relacionadas con el alcohol son el doble en Navidad y Año Nuevo que en el resto del año”, expone Anita Lorz Villagrana, del Club de Automovilistas (AAA). “Mucha gente asocia estas festividades con beber”, lamentó.
Durante la cena navideña, los accidentes automovilísticos con graves consecuencias suben un 70% comparado con otros períodos, mientras que en Año Nuevo crecen aún más, un 86%, según AAA.
A nivel nacional se reportaron 4,169 muertes en el mes de diciembre de 2007 a 2011 por choques relacionados con el consumo del alcohol.
Las corporaciones policíacas de Los Ángeles advierten que harán lo posible para detener a los chóferes ebrios y drogados antes de que causen problemas en las vialidades. Sus operativos se implementarán desde hoy hasta el 1 de enero de 2014.
En ese lapso se instalarán 66 retenes de sobriedad, 201 patrullajes en ciertos sectores, 14 dispositivos para verificar a personas en libertad condicional por conducir bajo la influencia del alcohol o las drogas (DUI), entre otras medidas “agresivas”.
“Habrá cero tolerancia para los sospechosos de manejar intoxicados si rebasan el límite [tener una concentración 0.08% o más de alcohol en la sangre]”, dijo Rob Castro, jefe de la Policía de Glendora.
Las estadísticas muestran que las fuerzas del orden han sido estrictas con estos infractores. El año pasado, más de 175 mil automovilistas ebrios fueron arrestados en California, suficientes para llenar al tope el estadio de los Dodgers en más de tres ocasiones.
“Los conductores necesitan estar conscientes que las agencias policiacas están enfocadas en los borrachos, especialmente en los feriados”, dijo Mark Guardado, de la Policía de Los Ángeles (LAPD).
Otra consecuencia es el alto costo por un arresto por cometer el delito: más de 15 mil dólares por multas, gastos legales y el incremento de la póliza del seguro vehicular. Para los menores de 21 años la ofensa representa un dolor de cabeza más duro, casi 22,500 dólares. La mancha de un DUI permanece en un historial de manejo por diez años.
