ACLU demanda al condado de Orange por las obras en el río Santa Ana
La asociación exige que eliminen una valla que se ha habilitado en torno a parte de un campamento de indigentes en el lugar
ACLU defiende que la cerca, que impide el acceso a la zona donde se están llevando a cabo las obras, viola los derechos de los desamparados. Crédito: Jill Replogle via Twitter
La Unión para las Libertades Civiles Americanas (ACLU, por sus siglas en inglés) ha presentado una demanda federal contra el condado de Orange que incluye una orden de restricción temporal contra los funcionarios del condado.
La organización exige que eliminen o habiliten entradas a través de la valla que han erigido recientemente como parte de las obras que están teniendo lugar en el margen del río Santa Ana cerca de Chapman Avenue, y que sostienen que han dejado atrapados a entre 75 y 100 indigentes.
La ACLU insiste en que no hay puertas adecuadas en dicho cercado, de unos seis pies de altura, y que los desamparados que acampaban en la zona y que están siendo desplazados han sido “encarcelados”. El texto de la demanda alega también que esto ha afectado especialmente a los desamparados ancianos o con discapacidades.
“Las acciones del condado constituyen falso encarcelamiento por privar a los individuos del campamento de su libertad de movimiento, en contra de su voluntad, al cercarlos sin una manera viable de que se vayan“, dijo la organización en una declaración.
Sin embargo, las autoridades del condado contradicen las acusaciones de ACLU. De acuerdo a Carrie Braun, responsable de comunicación pública del condado, el Departamento de Obras Públicas ha habilitado cuatro puntos de acceso a lo largo del área del proyecto.
“Sabemos que aunque esto es una propiedad privada, los individuos acampados ahí necesitan acceso a recursos hasta que cumplan voluntariamente con la solicitud del condado de trasladarse“, indicó.
A lo largo de las últimas semanas, las autoridades locales habían colocado avisos alertando a los desamparados sobre las obras que estaban próximas a empezar e indicando que tenían que abandonar el área. También les han proporcionado información sobre albergues, transporte gratuito hasta estos y almacenamiento temporal para sus pertenencias.
El problema que señalan los activistas a favor de las personas sin hogar es que el condado no cuenta con camas suficientes para alojar a todos los desplazados, ya que el número de desamparados que se concentraban hasta ahora en el río Santa Ana se había disparado en los últimos años y se estima que suman cientos.
