Más de 30 “Dreamers” son invitados a presenciar discurso de Trump ante el Congreso
En la lucha por "DACA", los demócratas ponen en escaparate a "Dreamers", mientras la Casa Blanca destaca a familias perjudicadas por la pandilla "MS-13"
WASHINGTON— Con el trasfondo de frágiles negociaciones bipartidistas sobre su futuro, más de 30 “Dreamers” presenciarán mañana el primer discurso del presidente Donald Trump ante el Congreso sobre el “Estado de la Unión”, en el que inmigración será uno de los principales ejes y que los jóvenes esperan ofrezca una solución “con corazón”.
Aunque en años anteriores, los legisladores también habían invitado a “Dreamers” al discurso anual sobre la situación y rumbo de EEUU, fuentes del Congreso afirmaron a este diario que se trata del mayor número de estos jóvenes en la historia del hemiciclo en la Cámara de Representantes.
Entre los invitados habrá beneficiarios del programa de “acción diferida” (DACA) de 2012 y del “Estatus de Protección Temporal” (TPS), así como familiares de inmigrantes que han sido deportados.
La mayoría de los “Dreamers” han sido invitados por legisladores demócratas, con la excepción del congresista republicano por Florida, Carlos Curbelo, que también invitó a uno.
El grupo más grande lo conforman “Dreamers” de California, pero otros provienen de estados como Arizona, Carolina del Norte, Colorado, Illinois, Kentucky, Maryland, Maine, Michigan, Nevada, Nueva Jersey, Nueva York, Oregón, y Virginia.
El viernes pasado, un funcionario de la Casa Blanca, que pidió el anonimato, dijo a la prensa que Trump ofrecerá un discurso imbuido en un tono “optimista” y “bipartidista”, y, sobre todo, “hablará con el corazón” y hará un llamado a la unidad nacional. Los cinco temas principales serán la inmigración, la infraestructura, la economía y la seguridad nacional.
Pero Van Le, director de servicios digitales de “America´s Voice”, dijo en un blog que aunque Trump diga que EEUU pisa terreno firme, para los “Dreamers” la realidad que han vivido es radicalmente distinta y opresiva.
En el campo de inmigración, aconsejado por asesores de “línea dura” como Stephen Miller y el fiscal general, Jeff Sessions, Trump “logró implementar cambios drásticos en políticas que han cambiado las vidas de miles de familias en todo el país”, dijo.
Por ello, algunos de los legisladores y “Dreamers” consultados por este diario coincidieron en la urgencia de que el Congreso apruebe un “Dream Act” para legalizar a los jóvenes indocumentados.
“El presidente Trump dijo que tendría una solución con corazón. Quiero escuchar eso, que tiene corazón y no propone medidas dañinas, que va a ayudar a todos los indocumentados“, dijo la “Dreamer” mexicana, Itayu Torres, invitada por el congresista demócrata de California, Jimmy Gómez.
“DACA me ha abierto muchas puertas, tengo mi cédula de identidad, mi permiso de trabajo, mi seguro médico y puedo viajar a otros estados. Estoy estudiando en Maryland… no es justo que no reconozcan nuestras contribuciones”, agregó Torres, quien emigró de Oaxaca con sus padres a Los Angeles con apenas seis meses de edad.
Torres, de 19 años, es miembro de “CHIRLA” y la “California Dream Network”, estudia segundo año de Ciencias Políticas en la Universidad Hood en Frederick (Maryland), y sueña con ser congresista o senadora, allí, en los mismos pasillos del Congreso que visitará mañana.
Por su parte, Gómez dijo que la presencia de estos jóvenes “envía un mensaje distinto al de la Administración, porque son gente luchadora, que sobresalen en sus estudios, que trabajan para ayudar a sus familias, y es necesario legalizarlos”.
Su colega demócrata por California, Nanette Díaz Barragán, afirmó que la propuesta de Trump de la semana pasada es un costoso e inaceptable “rescate”, que derrochará “miles de millones de dólares por un muro de odio”, y terminará perjudicando la inmigración legal.
“Los inmigrantes ayudaron a que este país sea grande. Jamás debemos olvidar eso”, enfatizó Barragán, cuyo invitado, Marco Chávez, es un veterano de guerra que había sido deportado a México hace 15 años, y que recientemente logró regresar con su familia en EEUU.
El senador demócrata por Nueva Jersey, Cory Booker, invitó a la “Dreamer” Elizabeth Vilchis, de Ridgefield, quien emigró a los siete años con su familia para escapar de la crisis económica en México.
Graduada en ingeniería mecánica de City College, Vilchis ahora dirige una entidad sin fines de lucro, “LatinoTech” para ayudar a emprendedores latinos a obtener ayuda de inversionistas para sus proyectos.
“Liz es una persona brillante, trabajadora, y está dejando una huella positiva en su comunidad. Deportarla a un país que apenas conoce es cruel, injusto y despiadado… como ella hay centenares de miles”, lamentó Booker.
Vilchis afirmó que la incertidumbre carcome a miles de “Dreamers” como ella, y su posible deportación contraviene los valores de EEUU y deja la advertencia de que otros grupos minoritarios también podrían ser blanco de injusticias.
En las tribunas también estarán Cindy García, esposa del “Dreamer” Jorge García, que fue deportado recientemente, y Amy Gottlieb, esposa de Ravi Ragbir, un activista trinidense de Nueva York detenido por la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), según un listado de “America´s Voice”.
Siguen en limbo
Desde que la Administración desmanteló “DACA” en septiembre pasado, más de 17,000 “Dreamers” han perdido sus permisos, quedando expuestos al riesgo de arresto y deportación del país, según “America´s Voice”.
La Oficina de Servicios de Inmigración y Ciudadanía (USCIS), no ha respondido a una solicitud de este diario sobre cuántos “DACAmentados” han renovado sus permisos tras el fallo de un juez federal en California que obliga a la Administración a reactivar “DACA” para la renovación de esos documentos mientras se decide el litigio en los tribunales. La Administración apelará el fallo pero USCIS dijo que inició la renovación de permisos de DACA para quienes lo soliciten.
A diez días de que el gobierno agote nuevamente sus fondos, en el Congreso no hay consenso sobre una eventual medida para codificar “DACA”, y muchos legisladores rechazaron la propuesta migratoria que presentó Trump el jueves pasado.
Esa propuesta incluye $25,000 millones para un muro fronterizo y más agentes de Inmigración, pero los demócratas la consideran demasiado punitiva, y los republicanos ultraconservadores la tacharon como una “amnistía inmerecida” para inmigrantes indocumentados.
Decenas de jóvenes indocumentados y activistas pro-inmigrantes del grupo “CASA de Maryland”, realizarán mañana por la noche un simulacro de una procesión fúnebre afuera del Capitolio para protestar contra las políticas migratorias de Trump y exigir la aprobación del “Dream Act”.
El contrapunto de la Casa Blanca
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, defendió hoy la propuesta migratoria porque, a su juicio, “protegerá a nuestra gente, pondrá los intereses de los trabajadores estadounidenses primero, y proveerá una solución permanente para DACA”.
También aseguró que Trump quiere mejorar las condiciones de vida de “todos los estadounidenses”, incluyendo los afroamericanos y los hispanos, y “seguirá luchando por ello”.
Al enumerar la decena de invitados por la Casa Blanca, Sanders destacó a dos parejas, Elizabeth Alvarado y Robert Mickens, y Evelyn Rodríguez y Freddy Cuevas, cuyas hijas, Nisa y Kayla, respectivamente, fueron “brutalmente asesinadas” por pandilleros de la “MS-13”. También mencionó a un agente de ICE, “CJ” Martínez, cuyas investigaciones lograron el arresto de más de 100 pandilleros de la “MS-13” acusados de homicidio, asalto, y tráfico de drogas y armas.
Al congresista Gómez no le sorprendió esa táctica porque Trump y muchos republicanos “han usado a los inmigrantes como chivos expiatorios, pintándolos a todos como criminales, violadores, enfocándose en los peores… es lo de siempre, en vez de edificar, los denigran”.
Está por verse si la nación verá mañana a un presidente dispuesto a trabajar de forma bipartidista y liderar para todo el país, como aseguró Sanders, o al que recurre a Twitter para atacar o culpa a sus detractores.