Disminuyen las muertes por armas de fuego de negros e hispanos en California entre 2000 y 2015
Un estudio de UC Davis registró 24,922 homicidios y 23,682 suicidios con armas de fuego entre 2000 y 2015
Las muertes por arma de fuego disminuyeron en California durante un período de 16 años que finaliza en 2015, impulsado principalmente por una disminución en la violencia de las pandillas y la caída de las tasas de homicidios entre las víctimas negras e hispanas, según un estudio reciente sobre la violencia con armas de fuego de la Universidad de California Davis.
Los hallazgos fueron publicados en la edición de mayo de la revista Annals of Epidemiology tras revisar 50,921 muertes de armas de fuego registradas en California entre 2000 y 2015. UC Davis proporcionó los resultados del estudio el lunes.
Durante el mentado período, el informe encontró 24,922 homicidios con armas de fuego y 23,682 suicidios con armas de fuego. Los investigadores dicen que el número de homicidios con armas de fuego cayó de 4,19 por cada 100.000 personas en 2000 a un mínimo de 3,13 por 100.000 en 2014, antes de registrar un ligero repunte en 2015.
La investigadora Veronica Pear atribuyó la disminución de los homicidios con armas de fuego a una reducción de la violencia de pandillas, particularmente en el condado de Los Ángeles.
El estudio también mostró una gran caída en el número de hombres negros e hispanos asesinados por armas de fuego. Así, Pear señala que el número de homicidios con armas de fuego que involucran a hombres negros descendió un 32 % desde su pico de 2005 (47 por 100,000 personas) hasta 31 por 100,000 en 2015. Asimismo, la tasa de homicidios de víctimas masculinas hispanas fue de 6.7 por 100,000 en 2015, bajando un 38 % desde su pico en 2005 (10.8 por 100,000).
La tasa de homicidios de las víctimas masculinas blancas y asiáticas se mantuvo estable durante todo el período, aproximadamente en el mismo nivel de 3 homicidios por cada 100,000 al año. Por consiguiente, más que como una reducción del mal uso de las armas de fuego, el estudio puede leerse como una reducción del racismo.
Pear dijo que espera que la nueva investigación sea utilizada por otros que estudian la causa y los efectos de la violencia armada. “También esperamos que sirva de plantilla para que los investigadores de otros estados creen perfiles similares”, dijo.
Durante los últimos 30 años, el gobierno federal ha dejado de lado los estudios de violencia con armas de fuego ya que la Asociación Nacional del Rifle logró que el Congreso restringiera significativamente los fondos para los Centros para el Control de Enfermedades. La NRA dijo que no se opone a la investigación con armas de fuego, pero está en contra de la investigación que “parcial, frágil o dirigida a la defensa”.
Algunas fundaciones privadas y California aumentaron recientemente la financiación de estudios de violencia con armas de fuego. California se convirtió en el primer estado en apoyar públicamente la investigación cuando los legisladores votaron para financiar el Violence Prevention Research Program de UC Davis con $5 millones de dólares durante cinco años.
El consorcio de atención médica de Kaiser Permanente anunció a principios de este mes que gastaría $2 millones de dólares para estudiar la violencia armada entre sus 12 millones de miembros.