Indocumentados ‘criminales’ son entregados a “la migra” para su deportación

El Sheriff  Alex Villanueva defiende la polémica contratación de un alguacil que motivó una demanda en su contra de la Junta de Supervisores de LA

Alex Villanueva, jefe del sheriff de LA. (Aurelia Ventura/La Opinión)

Alex Villanueva, jefe del sheriff de LA. (Aurelia Ventura/La Opinión) Crédito: Aurelia Ventura | Impremedia/La Opinión

Segunda parte de una serie de tres:

Al menos unos 600 inmigrantes indocumentados que cumplieron sus sentencias en el sistema penal del condado de Los Ángeles no fueron entregados a las autoridades del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) para ser deportados, como acontecía en las administraciones previas de los Sheriffs Lee Baca y Jim McDonnell.

Luego de cumplir su promesa de campaña de sacar de las cárceles a todos los agentes de ICE, la ACLU pronunció una queja sobre cambios “cosméticos” en el Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles.

“Ese cambio cosmético redujo en 47% las transferencias [a inmigración]’, dice el Sheriff Alex Villanueva. “Y va a cambiar, porque mantendremos un año de estudio de quienes han sido puestos en libertad y que pudieron haber sido transferidos por las administraciones anteriores vamos a ver cómo se comportan y si no cometen más delitos, eso me dará la confianza para reducirles o quitarle todos los cargos a cero”.

  • ¿Y cuantos han sido liberados?

“Alrededor de 600”

  • ¿Cuántos fueron deportados?

“Creo que en los primeros cuatro meses [de 2019] fueron unos 400. Cometieron crímenes como asesinato, asalto sexual, asalto a mano armada, robo a mano armada, es decir, todos los crímenes más violentos…es un balance entre mantener la confianza de toda la comunidad local y no vernos como agentes de inmigración, pero tampoco permitiremos amenazas a la comunidad”.

  • Entonces, ¿Quiénes son los contratistas que ahora hacen el trabajo de ICE?

“Son [contratistas del gobierno] quienes transportan a las personas de la cárcel a las agencias federales como los Marshall, la DEA, ATF, ICE y DHS. Dichas agencias solicitan a los criminales, pero no tienen acceso a nada. Cuando alguien ha cumplido su sentencia y va a ser liberado, les llamamos y les decimos vengan por él, y si no vienen ponemos a esa persona en la calle”.

La polémica contratación de Mandoyan

  • Un punto por el cual lo atacan a usted es la contratación del alguacil Caren Carl Mandoyan ¿Por qué lo contrató si sabía que había sido despedido del departamento a causa de presunta violencia doméstica?

“Lo contraté básicamente porque él es un caso muy común en el Departamento en los últimos cuatro años, cuando mi antecesor [Jim McDonnell] violaba las leyes de empleados de sus propios alguaciles y por que hacia lo que quería hacer y tomaba decisiones por una agenda política y no hacia decisiones por evidencias. Mandoyan fue una víctima de ese proceso, porque cuando hay evidencia exculpatoria que indicaba la inocencia o la culpabilidad, era deber del investigador presentar toda la evidencia al jefe de división que va a tomar esa decisión [de despido], y uno no puede esconder la evidencia que encuentre inconveniente para el caso, y hubo quienes decidieron que no había suficiente evidencia para despedirlo. Así pasó en el caso de él y de muchos. Pero hubo otra persona que impuso su decisión y dijo hay que despedirlo”.

  • ¿Quién es esa persona?

“Una que se llama Diana Teran, cuando era Asesora de Política Constitucional ella impusó su voluntad, y entonces, cuando el caso llegó al subalguacil para revisión ellos ya habían declarado que todos estaban de acuerdo en despedirlo, pero una cosa es que una sola persona quiso imponer su voluntad, aunque la evidencia decía todo lo contrario.

Entonces, cuando llevaron el caso a la Comisión de Servicio Civil la información del caso Mandoyan ya estaba dañada, y la decisión de ella [Diana Teran] ya estaba contaminada por ese mismo procedimiento donde escondieron evidencia exculpatoria”.

  • Pero hay unos videos que LA Times publicó donde se ve claramente que Mandoyan intenta abrir la puerta de la casa de la mujer con quien vivía sin su consentimiento, ella lo insulta, le pide que se vaya de su casa y hasta intenta meterse por el baño, actuando como si fuera un acosador.

“Lo que no dice el video y lo que LA Times no quiere que los lectores sepan es que ella le abrió luego la puerta y lo dejó entrar. Ella lo había dejado afuera; por un periodo de dos años enteros, ellos tuvieron problemas como mucha gente los tiene y el error fue quedarse juntos por demasiado tiempo en su relación tóxica, pero la evidencia que presentaron no es consistente con las acusaciones. Ellos quisieron dejar la imagen [de Mandoyan] como un exnovio que trató de meterse a la brava a la casa de su pareja, pero en su relación estaban viviendo juntos cuatro o cinco días a la semana en ese apartamento y ella lo admitió. Entonces, es difícil reconciliar eso con la imagen”.

  • Pero da la apariencia de actuar como un acosador, ¿No lo cree?

“Él dormía en esa casa y ella lo dejo afuera con todas sus pertenencias adentro de la casa y nosotros tenemos los textos que por dos años se decían ‘te amo, te amo’…era una relación pésima, pero no anormal y creo que lo mejor habría sido apartarse cada quien; el error que cometieron fue quedarse juntos por demasiado tiempo, pero la evidencia en su contra no es consistente con las acusaciones”.

  • Pero usted lo contrató sabiendo que tenía dos demandas en contra del LASD. ¿Usted le pidió que las retirara a fin de contratarlo? Él trabajó como voluntario en su campaña política ¿Le prometió la reincorporación tras su despido en 2016?

“Nosotros no lo íbamos a dejar que regresara con las demandas en pie; yo tengo la responsabilidad fiscal del departamento. A él no se le pagó nada durante la campaña; a todos les dije que se investigaría caso por caso y que la decisión justa seria en base a la evidencia en cada caso de todos los que sufrieron bajo el mando de McDonnell y se quedaron sin trabajo”.

  • ¿Cuántos oficiales del LASD estuvieron involucrados en este presunto tipo de abusos laborales?

“Fueron 400 los que recibieron cartas de despido; de esos, 192 fueron despedidos finalmente y los otros tuvieron algún arreglo o una disciplina menor a un despido. De ese total, hay 68 que están siendo juzgados por la comisión civil y una corte superior; esa es la herencia muy dañina que me dejó McDonnell”.

  • ¿Y todo esto lo sabía la Junta de Supervisores?

“A la Junta de Supervisores no le importaba porque para ellos, cuantos más alguaciles se podía despedir era mejor; ellos no querían saber de detalles ni que el despido fuera justo en base a evidencias. A ellos no les importó un comino”

  • ¿Habla usted de los cinco miembros de la Junta?

“Los cinco nunca se opusieron a los despidos injustificados, en particular con los alguaciles afroamericanos que sufrieron casi el doble de los despidos, aun cuando son solo el 8% [de la fuerza laboral] del departamento, y el despido del 75% de empleados latinos que estaban a prueba durante un año; la decisión no era retenerlos sino despedirlos por el más mínimo error o una violación sencilla de las pólizas del departamento que cometían antes de que se convirtieran en empleados permanentes; los despidos se hacían solamente de acuerdo con el criterio de Jim McDonnell; el solo quería echarlos a la calle como a los perros y no le importaba capacitarlos o entrenarlos cuando deberíamos entender que tienen que pasar un tiempo para ajustarse a las leyes y el reglamento y como desempeñar su papel como alguacil. No son robots, son seres humanos”.

  • Lo que usted afirma se escucha como si hablara de racismo en los despidos…

“Tengo mucha curiosidad del por qué los afroamericanos y latinos fueron la mayor cantidad de todos los despedidos; [el racismo] es posible pero no pude completar el estudio ni tengo esas conclusiones todavía…estamos esperando que se resuelva el asunto de la demanda que hizo la Junta de Supervisores contra mi autoridad legal”.

Mañana: El Sheriff Alex Villanueva afirma que la Junta de Supervisores pretende ejercer la supremacía del poder sobre él y su departamento. La demanda en su contra no le quita el sueño y defiende las contrataciones de su hijo y su sobrino en el LASD.

1ra Parte

‘No hay pandillas en el Departamento del Sheriff’ de LA: Alex Villanueva

3ra parte

‘Quieren tener supremacía sobre mí y el departamento’: Villanueva

En esta nota

Alex Villanueva condado de Los Ángeles contrataciones
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