Demócratas salen en defensa de Obamacare en la epidemia de coronavirus, tras pedido de Trump para eliminarlo
El presidente Donald Trump dijo el miércoles que su administración instará a la Corte Suprema a revocar Obamacare
El presidente Trump mantiene su asalto legal total contra la Ley de Cobertura Médica (ACA) conocida como Obamacare, en medio de una pandemia de coronavirus que hará que millones de estadounidenses más dependan de esa cobertura de salud.
La Administración parece estar duplicando su estrategia legal, incluso después de que el fiscal general William Barr advirtió esta semana a los principales funcionarios de la Administración sobre las ramificaciones políticas de socavar la red de seguridad que garantiza Obamacare durante la emergencia del coronavirus, reporta POLITICO.
Hace dos años, los demócratas retomaron la Cámara de Representantes y los estados en todo el país al prometer defender Obamacare, en particular las protecciones de seguro de salud que evitan que se les niegue cobertura a los enfermos o se les cobre más debido a una condición de salud preexistente.
El problema de dejar a millones de personas sin cobertura médica puede ser aún más grave en medio del brote de COVID-19 que los expertos en salud creen que persistirá durante el otoño y tener serias repercusiones en la decisión de los votantes también durante las elecciones de noviembre.
El Departamento de Justicia (DOJ) tenía una fecha límite el miércoles para cambiar su posición en un caso contra Obamacare presentado por estados liderados por republicanos, pero Trump dijo a los periodistas el miércoles por la tarde que su administración se mantendría firme. El DOJ declinó hacer comentarios.
“Obamacare es un desastre, pero lo hemos hecho apenas aceptable”, dijo Trump.
Demócratas advierten de riesgo de revocar el Obamacare
La ley de Cuidado Asequible (ACA), también conocida como Obamacare, que el gobierno de Donald Trump quiere eliminar, es el “salvavidas” de millones de estadounidenses que “necesitan pruebas y tratamiento del COVID-19”, señalaron este jueves dirigentes demócratas de Florida.
El presidente Trump quiere “volver a la época en la que millones de estadounidenses no tenían cobertura”, dijeron la congresista Debbie Mucarsel-Powell, de origen ecuatoriano, el senador de Florida José Javier Rodríguez y las representantes estatales Susan Valdés y Cindy Polo en una rueda de prensa por videoconferencia.
Más de cuatro millones de latinos en el país se benefician de Obamacare y la población más vulnerable al COVID-19, los que padecen enfermedades crónicas, lo que en los seguros médicos se conoce como “condiciones previas”, está también cubierta.
En medio de esta crisis sanitaria “será menos probable que busquen atención médica si no la pueden pagar”, dijo Mucarsel-Powell.
La congresista presentó el miércoles un proyecto de ley en la Cámara de Representantes para cubrir la atención médica por el coronavirus SARS-CoV-2 para todas las personas afiliadas a “Medicare Advantage” y que beneficiaría al 55 % de los hispanos, al 39 % de los beneficiarios totales afroamericanos y a 600,000 puertorriqueños.
“La respuesta caótica del presidente a esta pandemia ha empeorado esta crisis de salud pública y su compromiso de derogar el ACA ignora la realidad”, señalaron los dirigentes demócratas.
El programa Obamacare ha sido el blanco favorito de Trump, quien durante su campaña electoral en 2016 prometió que “de inmediato y desde el primer día” de su Presidencia abrogaría esta ley y la reemplazaría con un programa mucho mejor, más barato, que ampararía a todos los estadounidenses.
El miércoles, después de firmar una proclamación en el Día Nacional de las Enfermeras, Trump reiteró que quiere eliminar ACA.
Se espera que la Corte Suprema escuche el caso de Obamacare durante su próximo mandato a partir de octubre, pero aún no ha programado argumentos. Una decisión es poco probable antes de las elecciones del 3 de noviembre. La corte ha confirmado previamente a Obamacare en dos desafíos importantes que amenazaron la supervivencia de la ley.
Obamacare ha cubierto a unos 20 millones de personas, y se espera que la ley brinde una red de seguridad importante a los estadounidenses durante la caída económica provocada por el coronavirus.
Con información de POLITICO y EFE