Crece violencia en LA: Latino es asesinado al salir de la tienda de la esquina de su casa

La vida de José Leandro Jr., un joven de 31 años, terminó abruptamente tras ser baleado al salir de la tienda de la esquina de su casa a donde fue a comprar unos víveres que le hacían falta. Dos días después murió en el Hospital Saint Francis de la ciudad de Lynwood.

El incidente ocurrió el lunes 7 de marzo en la ciudad de Huntington Park, donde vivió toda su vida. Falleció el miércoles 11 de marzo poco antes de las 2 de la mañana.

Su familia necesita de tus donativos para sepultarlo. Cualquier ayuda es apreciada. Para donar, visita el sitio: In Loving Memory of José Leandro.

Evelyn Hernández, quien fuera su compañera durante 7 años, relató que José fue herido alrededor de las 7:30 de la noche en la cuadra 2700 de la avenida Gage de Huntington Park.

“Teníamos tres meses que nos habíamos ido a vivir juntos. Acabamos de rentar un departamento en la ciudad de Commerce”.

El día de la tragedia habían ido a visitar a Huntington Park a los padres de José, porque era cumpleaños de su sobrina, a quien él quería mucho.

“Ese día le tocó entrar tarde a la fábrica de papel cartón en la trabajaba. Antes de irnos, fue a la tienda por unas cosas que nos hacían falta en la casa como papel de baño y unas toallas.

José y Evelyn se preparaban para regresar a su casa. “Él solo iba a recoger el lunch para irse a su trabajo, pero antes quiso ir a la tiendita que está muy cerca de donde viven sus padres. “En la esquina de la vuelta”.

La familia de José y su compañera Evelyn estaban en la casa, cuando José llamó por teléfono a su hermano para decirle que un hombre lo quería agredir.

“Su cuñado salió corriendo y nosotros detrás de él. Llegamos al lugar. José me entregó lo que había comprado, y en eso la persona que buscaba problemas, le disparó desde su carro y huyó”.

José recibió 4 disparos que le costaron la vida.

Evelyn entristecida dice que no recuerda más. Lo único que sabe es que su cuñado ya había pasado por el lugar minutos antes, y se había dado cuenta que un hombre estaba afuera de la tienda buscando problemas. Pero su cuñado lo ignoró y siguió de largo. 

Su esposo hizo lo mismo, pero el hombre que estaba armado, le disparó.

Evelyn describe a su compañero como un hombre físicamente alto y complexión grande.

“Era muy bromista y amable. Siempre estaba sonriendo, dispuesto a ayudar. Era muy trabajador y tenía sus metas”.

La pareja no tenía aún hijos. Pero Evelyn comparte que el sueño de José era casarse, formar una familia, tener una niña y comprar una casa.

Su sorpresiva muerte dejó a su familia, presa del dolor. Le sobreviven sus padres, originarios de México, y sus 6 hermanos. Él era el más chico. 

Evelyn dijo que la familia espera justicia para José. 

“Les pido a todos que se cuiden, porque ahorita hacer algo tan simple como ir a la tienda, puede costarnos la vida”.

Un sondeo del Instituto de Políticas Públicas de California, cuyos resultados fueron dados a conocer el mes pasado, arrojó que 41% de los angelinos que respondieron, señalaron que su mayor preocupación, es el incremento del crimen.

En el 2021, se registró un aumento de 12% en los homicidios; y en general, el crimen violento subió 4%. 

De acuerdo a estadísticas del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), hasta el 5 de febrero, en lo que va del año, se reportaron 39 asesinatos, contra 31 de un año atrás en el mismo periodo.

Es por eso que todos los candidatos a la alcaldía de Los Ángeles han hecho del aumento de la violencia, uno de los temas prioritarios de campaña. Todos están en contra de desfinanciar a la policía, y a favor de mantener al menos el mismo número de policías que se tienen ahora, y llenar las plazas vacantes. Otros candidatos, quieren que el LAPD tenga hasta 11,000 oficiales.

La comunidad latina no ha escapado a la ola de violencia que azota a Los Ángeles.

El caso más reciente ocurrió el fin de semana cuando Marcos Sandoval de 52 años murió a balazos mientras caminaba con su perrito cerca de las 5 de la mañana en el área de Mid-City.

Un auto Sedán se le acercó cerca de la esquina de la calle Saturn y la avenida Genesse, acto seguido el conductor se bajó del auto, intercambiaron unas palabras y abrió fuego para luego regresar a su vehículo y continuar su camino como si nada.

Marcos falleció en el lugar; y como en el caso de José Leandro, la policía busca al asesino.

Piden protección 

Martha Ofelia Jiménez, líder comunitaria del este de Los Ángeles, dijo que estamos en un estado de crisis y emergencia en el que esperan protección del LAPD y del sheriff de Los Ángeles, y no recortes a los fondos de los policías y alguaciles.

“Es muy preocupante la inseguridad porque tenemos áreas muy peligrosas dentro de la ciudad y el condado”.

Agregó que es muy triste ya no ver policías alrededor de las escuelas cuando los niños salen de clases. 

“El otro día, una persona sin hogar por poco me estrella una botella en la cabeza en una parada de autobús. De no ser porque tengo muy buenos reflejos y pude moverme a tiempo, quién sabe qué hubiera pasado”.

Jiménez urgió a los políticos y funcionarios a demostrar liderazgo para frenar el aumento del crimen en Los Ángeles.  

“Mientras eso ocurre, tenemos que estar muy alertas, cuidándonos”.

Evitemos confrontaciones

En una entrevista reciente con La Opinión, el capitán Adrián González de la División de Homicidios del LAPD, dijo que en general, se observa un aumento de las agresiones en la ciudad, por parte de gente que piensa que no hay consecuencias.

“Una discusión puede llevar a un asesinato como vimos el caso reciente de un empleado de Taco Bell, quien tras un alegato con un cliente, le quitó la vida”.

El capitán González, experto en investigación de homicidios, dijo que no sabe cuáles son las causas de tanta agresividad en el ambiente angelino, a partir de la pandemia. 

“Es una combinación de factores, pero la recomendación es no dar pie a confrontaciones. Si andan en la calle caminando y ven a una persona que puede representar peligro, mejor crucen la calle; y lo mismo cuando andamos manejando, dejemos que otro conductor se nos meta en el carril, porque no sabemos qué puede pasar si nos ponemos a pelear con esa persona”.

Lamentó incluso que en estos momentos, ya ni siquiera se pueda no estar de acuerdo en los temas políticos y seguir siendo amigos o familia. 

“Vivimos tiempos en los que ya no se puede hablar sin estar de acuerdo. Ya no es aceptado tener diferentes opiniones”.