La vida del barrio es el estilo de Tokischa

Entre Tokischa y su padre había una pelea constante cuando ella era una niña. Él la criticaba por su forma de ser tan extrovertida y sensual.

“Desde niña siempre fui así”, dijo la artista. “Mi papá me decía que yo iba a ser una exhibicionista”.

Con los años, esta característica de Tokischa no hizo más que acentuarse, y ahora que ya es una adulta –y como si hubiera sido una premonición–, es una parte fundamental de su estilo como artista.

“Ya es algo propio de mi naturaleza”, dijo. “Mi sexualidad y como yo me expreso es algo más de mí, de mi naturaleza como persona”.

Tokischa nació en Los Frailes, un barrio popular de Santo Domingo donde su población de aproximadamente 20 mil personas es mayormente de clase media baja y muy baja, de acuerdo con la fundación Siempre Adelante, que hace obras benéficas en esa zona. Una gran parte de sus habitantes trabajan en el sector industrial o viven del comercio informal.

En el caso de Tokischa y su familia, ellos no vivían en un área conflictiva de ese barrio, más bien ellos eran los bulliciosos y pendencieros.

“Donde yo me crié es tranquilo”, dijo la cantante de trap desde Nueva York, donde se encontraba de gira. “Pero mientras más se mete uno en el barrio siempre más caliente se va poniendo […] Creo que los que eran más bulliciosos era mi familia; éramos los que siempre estábamos haciendo pleitos: mi papá, mis tías; siempre como muy notable nuestra presencia en el barrio. Sí, vengo de una familia muy agresiva”.

Cuando Tokischa Altagracia Peralta, su nombre completo, salió de su casa a los 18 años, comenzó a caer en cuenta de que la agresividad que ella tenía dentro podía ser canalizada de otra forma, como por ejemplo, a través de la música, su pasión desde pequeña.

“Yo siento que yo he podido calmar esa agresividad entendiendo que es como un poder energético”, dijo. “Que si yo lo mando a otra cosa, le doy otro propósito, le puedo sacar más provecho; entonces, yo hago un performance con agresividad, pero con una agresividad educada, educada a sacar esa energía y a ponerla en un performance“.

Entonces combinó en su estilo lo más natural en ella: la sensualidad extrema y la crudeza con la que fue criada. De ahí surgieron temas como “Linda”, “Tukuntazo”, “Desacato escolar” y “Perra”. Las canciones, que hablan de vivencias, fantasías, lo que la rodea y de dónde viene Tokischa, combinadas con lenguaje explícito, se convirtieron en poco tiempo en éxitos en las redes sociales. Ahora la artista cuenta por millones sus seguidores en varias partes del mundo.

Hace unas semanas visitó la costa este para presentar el Popola Tour, que la llevó por primera vez por varias ciudades de Estados Unidos. Sus shows se vendieron en su totalidad a pesar de que todavía no ha editado ni un disco. Ese es un proyecto para 2023.

Mientras tanto sigue preparando sencillos y haciendo oídos sordos a quienes la critican en las redes sociales por el contenido de sus canciones.

“Yo tengo más comentarios bonitos [que feos], más gente que me apoya, más gente que va a mis shows, que consume mi música”, dijo la artista de 26 años. “Entonces esos son los que para mí valen; los negativos también suman en número pero no me causan nada, solo siento que una persona que se dirige a otra para comentarle algo negativo tiene algo personal que no ha resuelto y simplemente lo proyecta de esa forma”.