Rusia busca capturar a comandantes del batallón Azov, y detiene a subcomandante nacionalista “Aidar”

Los dos militares buscados están acusados de atentar contra la vida de ocho soldados rusos en la región ucraniana de Jersón. Mientras encierran en prisión preventiva al subcomandante del batallón nacionalista ucraniano

Rusia detuvo al subcomandante Denís Muryga por participar en un grupo ilegal armado.

Rusia detuvo al subcomandante Denís Muryga por participar en un grupo ilegal armado. Crédito: John Moore | Getty Images

Rusia ha puesto a dos comandantes del batallón Azov en la lista de busca y captura por haber atentado supuestamente, contra la vida de al menos ocho soldados rusos en la región ucraniana de Jersón, según la agencia Interfax.

Los dos comandantes son Serguéi Velichko y de Konstantin Némichev, según la misma fuente. Sus fichas figuran en la lista de Interior de personas buscadas “en relación a un caso penal”.

De acuerdo con el Comité de Investigación de Rusia, los dos miembros de Azov, regimiento que la Fiscalía ha pedido declarar, como una organización terrorista y que Moscú califica de “nazi”, estarían implicados en un atentado contra la vida de al menos ocho soldados rusos en la región de Járkov en el sur de Ucrania.

Los dos miembros de Azov fueron acusados en ausencia por Rusia.

A si mismo, se informó que Rusia detuvo a Denís Muryga, subcomandante de una unidad que pertenecía al batallón nacionalista ucraniano “Aidar” antes de ser reorganizado y absorbido por el ejército de Ucrania.

Un tribunal de Rostov del Don, región limítrofe con Ucrania, dictó hoy dos meses de prisión preventiva para el militar, según la agencia Interfax.

De acuerdo con esta fuente, Muryga, que tiene ciudadanía rusa y ucraniana, fue detenido cuando intentaba cruzar en abril como presunto refugiado la frontera con Rusia en la región de Rostov. Según la agencia oficial RIA Nóvosti, el hombre es sospechoso de haber participado en un grupo ilegal armado.

Rusia lo acusa además de haber destruido en 2015, en el marco del conflicto armado entre el ejército ucraniano y los rebeldes pro-rusos apoyados por Moscú, un puente en la autoproclamada república popular de Lugansk y de haber matado como resultado a guardias de la milicia separatista.

“Aidar” fue un batallón de defensa territorial nacionalista que operaba en 2014 en el norte de la región de Lugansk y fue acusado ese año por Amnistía Internacional de haber estado involucrado en abusos generalizados, que incluyen secuestros, detenciones ilegales, malos tratos, robo, extorsión y posibles ejecuciones. EFE

En esta nota

Rusia
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain