El inicio de la construcción de la Bóveda Global de Semillas
La Bóveda Global de Semillas es un proyecto para salvar la diversidad de cultivos ante un posible cambio climático catastrófico, además funciona para la investigación para tratar el hambre mundial.
El 15 de junio de 2006, en la remota isla de Spitsbergen, a medio camino entre la parte continental de Noruega y el Polo Norte, los primeros ministros de Noruega, Suecia, Finlandia, Dinamarca e Islandia colocaron la ceremonia de la primera piedra de la Bóveda Global de Semillas.
La bóveda, que ahora tiene capacidad para albergar 2250 millones de semillas, tiene como objetivo “brindar un seguro contra la pérdida incremental y catastrófica de la diversidad de cultivos”.
Administrado conjuntamente por Global Crop Diversity Trust (The Crop Trust), el Nordic Genetic Resource Center (NordGen) y el gobierno noruego, Seed Vault surgió de varios esfuerzos diferentes para preservar especímenes de las plantas del mundo.
Su ubicación, en lo profundo de una alta montaña en una isla cubierta por permafrost, es ideal para el almacenamiento en frío y protegerá las semillas incluso en caso de un gran aumento del nivel del mar.
La enorme bóveda, donde las semillas se pueden almacenar de tal manera que permanezcan viables durante décadas o incluso siglos, se inauguró en 2008.
Según Crop Trust, la bóveda de semillas está destinada a preservar la diversidad de cultivos y contribuir a la lucha mundial para acabar con el hambre.
A medida que el aumento de las temperaturas y otros aspectos del cambio climático amenazan las plantas de la Tierra, existe el riesgo no solo de perder especies, sino también de depender demasiado de las que quedan, lo que hace que la humanidad sea más vulnerable y aumente la inseguridad alimentaria.
Los científicos también se esfuerzan por crear variedades de cultivos más nuevas y resistentes que ya existen, y el banco de semillas funciona como una reserva de la que pueden extraer con fines experimentales.
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