Jurado de Nikolas Cruz recomienda cadena perpetua por la masacre de Parkland

Nikolas Cruz, el asesino confeso de 17 personas en una escuela secundaria en Parkland, Florida en 2018, se salvó de la pena de muerte, cuando un jurado recomendó cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional

Nikolas Cruz se salvó de la pena de muerte cuando un jurado de Florida recomendó una sentencia de cadena perpetua

Nikolas Cruz, habla con la defensora pública adjunta Melisa McNeill, mientras se leen los veredictos en el juzgado del condado de Broward en Fort Lauderdale. Crédito: AMY BETH BENNETT | AFP / Getty Images

Nikolas Cruz, el hombre que disparó y mató a 17 personas en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas en Parkland, Florida, en 2018, se salvó de la pena de muerte, cuando un jurado de Florida recomendó una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

La decisión del jueves se produce más de cuatro años después del tiroteo masivo más mortífero que se haya llevado a juicio en Estados Unidos, según informó CBS.

Según la ley de Florida, solo se puede dictar una sentencia de muerte si los miembros del jurado recomendaron por unanimidad que se ejecutara.

Si al menos un miembro del jurado encontró que los factores agravantes de los asesinatos no superaron los factores atenuantes presentados por la defensa, la única otra opción es cadena perpetua.

Cruz, de 24 años, se declaró culpable en octubre pasado de todos los cargos presentados en su contra por un gran jurado de Florida, que incluyeron 17 cargos de asesinato premeditado y 17 cargos adicionales de intento de asesinato para dar cuenta de las personas heridas durante el tiroteo.

El juicio penal comenzó en julio después de meses de retrasos y concluyó a principios de esta semana con los argumentos finales ante un jurado secuestrado que pasó a deliberar.

Los miembros del jurado tenían que determinar si Cruz debía enfrentar la pena de muerte o cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por la masacre de Parkland, que ocurrió el Día de San Valentín en 2018 y sigue siendo el tiroteo en una escuela secundaria más mortífero registrado en los EE.UU.

La fiscalía y la defensa habían presentado argumentos marcadamente diferentes sobre el estado mental de Cruz durante el juicio de pena emocional, en el que se mostraron al jurado imágenes gráficas y grabaciones de vigilancia del tiroteo y en el que varios familiares de las víctimas dieron testimonio.

El fiscal Mike Satz describió a Cruz como “calculado, manipulador y letal” y presionó por la pena de muerte porque el acusado, de quien dijo que padecía un trastorno de personalidad antisocial, “estaba persiguiendo a sus víctimas” cuando acechaba un edificio de aulas de tres pisos en Marjory Stonemason Douglas durante siete minutos el 14 de febrero de 2018.

Satz señaló en sus comentarios finales el martes que Cruz había disparado a algunas víctimas a quemarropa con un rifle semiautomático estilo AR-15 y regresó con algunos de los heridos “para acabar con ellos”.

Satz también hizo referencia a videos y comentarios en línea que Cruz hizo antes del tiroteo, donde articuló sus planes “para matar a una… tonelada de personas y niños”.

“Se dice que lo que uno escribe y dice es una ventana a su alma”, dijo Satz al jurado, calificando los asesinatos como “implacablemente atroces, atroces y crueles”.

Mientras los seres queridos de las víctimas, muchos de ellos padres, lloraban en la sala del tribunal, Satz volvió a relatar las circunstancias que rodearon la muerte de cada persona durante el tiroteo en Parkland y recordó cómo Cruz miró a varias víctimas a los ojos antes de dispararles varias veces.

“Todos sabían lo que estaba pasando, lo que iba a pasar”, dijo Satz, quien recitó los nombres de las víctimas y específicamente relató la muerte de una niña de 14 años, quien recibió dos disparos del acusado. El arma fue colocada contra su pecho antes del segundo disparo.

“Justo en su piel. Le dispararon cuatro veces y murió”, dijo Satz. El fiscal señaló un comentario de YouTube de Cruz que se mostró previamente durante el juicio de la pena, donde dijo: “No me importa dispararle a una niña en el pecho”. Continuando, Satz le dijo al jurado, “eso es exactamente lo que hizo”.

Mientras tanto, la abogada defensora Melisa McNeill, quien se enfrentó con la jueza Elizabeth Scherer después de que su caso terminó inesperadamente en agosto, había construido un argumento que sugería que Cruz era “un joven mentalmente enfermo, con daño cerebral y quebrantado”.

Al decir que el acusado “sabía el bien del mal y eligió el mal”, McNeill argumentó que la psicología y el comportamiento violento de Cruz se derivaban de los efectos del abuso de alcohol en el feto. Ella había presionado por una cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

“Es lo correcto. La misericordia es lo que nos hace civilizados. Dar misericordia a Nikolas dirá más sobre quién eres de lo que jamás dirá sobre él”, dijo McNeill en la corte, preguntando, “¿cuántas veces hemos tomado decisiones basados únicamente en la ira y nos arrepentimos?”

El argumento final de McNeill se basó en la evidencia de que la madre biológica de Cruz, Brenda Woodard, bebió mucho durante su embarazo y “lo envenenó en el útero”. Ella dijo que, como resultado, Cruz tenía un trastorno del espectro alcohólico fetal, lo que provocó el comportamiento alarmante y violento que exhibió a partir de los 2 años.

“No hay momento en nuestras vidas en el que seamos más vulnerables a la voluntad y los caprichos de otro ser humano que cuando estamos creciendo y desarrollándonos en el vientre de nuestras madres”, dijo McNeill, mientras pedía al jurado que dictara cadena perpetua en lugar de la pena de muerte.

“No hay castigo que puedas darle a Nikolas Cruz que lo haga sufrir tanto como esas personas y tanto como seguirán sufriendo todos los días”, continuó la abogada defensora.

La masacre de Parkland es el tiroteo masivo más mortífero que jamás haya ido a juicio en los EE.UU., ya que otros nueve que mataron al menos a 17 personas en tiroteos masivos murieron durante o poco después de las masacres.

El sospechoso implicado en el tiroteo masivo de 2019 en un Walmart en El Paso, Texas, donde murieron 23 personas está actualmente en espera de juicio.

Los miembros del jurado hicieron una rara visita a la escena de la masacre en agosto, siguiendo los pasos del tirador a través del edificio de tres pisos para estudiantes de primer año, conocido como “Edificio 12”.

Durante la visita vieron sangre seca, agujeros de bala y pétalos de rosa esparcidos.

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