El crimen organizado controla la producción y venta del limón en Michoacán

El promedio de hectáreas cultivables de limón que posee cada productor es de entre dos a cuatro, pero se rigen bajo las reglas de la delincuencia organizada

venta de limón

Esta situación data de 2010, cuando La Familia Michoacana reinaba en el estado. Crédito: Pedro Pardo | AFP / Getty Images

Michoacán es un hermoso estado mexicano que se ha ensombrecido por la rampante violencia que en él impera, la cual impacta en varios sectores de la población, tal como ocurre con la producción y venta del limón, una actividad comercial que ha sido controlada por el crimen organizado, causando una espiral de situaciones.

De acuerdo con el diario La Jornada, los habitantes y productores de Buenavista Tomatlán aseguran vivir una “terrible crisis económica”, no solo porque los miembros del crimen organizado tomaron la producción del cítrico, sino también porque se han apoderado del abasto de artículos de primera necesidad, los cuales venden a comerciantes locales a precios hasta 20 por ciento más elevados de lo normal.

Esta región de la Tierra Caliente, que en 2013 vio surgir a las autodefensas haciendo un parteaguas en la historia de México, tiene alrededor de 22,000 hectáreas cultivables de limón agrio, en las cuales laboran cerca de 4,000 ejidatarios y pequeños productores. El promedio de hectáreas que posee cada persona es de entre dos y cuatro, pero se rigen bajo las reglas de la delincuencia organizada.

La Famila Michoacana inició la tragedia

La situación data de 2010, cuando La Familia Michoacana reinaba en el estado, fue entonces cuando Jesús “El Chango” Méndez ordenó que sólo se cortara el cítrico en determinadas horas y días de la semana.

Un propietario de una huerta dijo que el líder criminal dio una orden clara, acompañada de amenazas, pues a quien se le sorprendiera desobedeciéndolo se le aplicaría una multa de 5,000 pesos, si reincidía serían 10,000, pero en caso de haber una tercera vez sería castigado físicamente.

Para ello se usaban tablas como una especie de pala con hoyitos, y les pegaban en el trasero, los orificios hacían que se les reventara la piel; de esa forma golpearon a varios productores y comenzaron a meter el control por la fuerza.

La Familia Michoacán perdió fuerza en el estado, llegaron nuevos grupos delincuenciales, pero esa práctica no se fue, ya que posteriormente fue implementada por Los Caballeros Templarios y, actualmente, por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Dicho esquema de extorsión les ha funcionado bien a todos: al empacador, a quien comercializa, pero quienes pierden son el productor y los cortadores.

El precio del limón ha subido estratosféricamente en varias ocasiones, afectando a toda la población del país, y aunque las condiciones climáticas han sido un factor importante para ello, lo vivido en Michoacán es otra de las razones.

Michoacán es el primer productor de limón a nivel nacional, produce 670,000 toneladas del cítrico anualmente, la mayoría, en los municipios de Apatzingán, Buenavista, Parácuaro, Aguililla, Tepalcatepec y Mújica.

Su clima cálido es excelente para que todo el año pueda cultivarse el cítrico, pero muchas de las regiones productoras son ahora guaridas de sanguinarios sicarios, quienes han asolado la vida de los habitantes.

La belleza del estado y su tierra fértil se han manchado con la sangre de la gente, que ya no sabe vivir en esa situación, quienes se quedan, resisten, pero el costo es muy alto.

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