La baguette francesa obtiene el estatus de patrimonio mundial de la humanidad
El pan francés se une a la pizza, el café árabe y otros alimentos que figuran en lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO
La baguette francesa es declarada patrimonio de la humanidad Crédito: PHILIPPE LOPEZ | AFP / Getty Images
Francia de encuentra de fiesta luego de que la la UNESCO, el organismo cultural de la ONU, diera a la baguette el estatus de patrimonio mundial.
Ese pan largo y crujiente que es un delicioso elemento básico de la vida francesa, se incorpora hoy a la lista del patrimonio cultural inmaterial de la ONU como una apreciada tradición que debe preservar la humanidad.
El pan tradicional francés recibió el reconocimiento después de que el Ministerio de Cultura de Francia advirtiera de la continua desaparición de panaderías tradicionales, con el cierre de unas 400 cada año en el último medio siglo.
Con el nuevo estatus de la baguette, el gobierno francés dijo que planeaba crear un día de la baguette artesanal, llamado “Día de la Panadería Abierta”, para conectar mejor a los franceses con su patrimonio.
De acuerdo con la UNESCO: “La baguette es el tipo de pan más popular que se consume en Francia durante todo el año. El proceso de fabricación tradicional incluye varias etapas: dosificación y pesaje de los ingredientes, amasado, fermentación, división, reposo, moldeado manual, acabado, escarificación (la firma del panadero) y cocción”.
También destaca que la baguette se diferencia de otros panes en que se compone de sólo cuatro ingredientes (harina, agua, sal, levadura y/o masa madre) de los que cada panadero obtiene un producto único. La baguette requiere habilidades y técnicas especiales: se hornea a lo largo del día en pequeñas tandas y el resultado varía según la temperatura y la humedad.
Se une a otros alimentos protegidos
La baguette se une a otros alimentos y culturas culinarias que figuran en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO, como la “dieta mediterránea”, la elaboración de la pizza napolitana, el kimchi coreano, la cultura cervecera belga y el café árabe.
Otro pan que ha sido considerado patrimonio de la humanidad es el pan de especias croata, que una delicia croata surgida de los monasterios en los que también se elaboraban velas y miel.
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