Precios de algunos bocadillos de la fiesta del Super Bowl bajaron un 20% en comparación al año pasado

Para este año la Federación Nacional de Minoristas anunció que se espera un aumento en el consumo durante la transmisión de la Super Bowl de $16,000 millones en refrigerios, bebidas y otros artículos

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El precio de las alitas, uno de los alimentos más consumidos durante la transmisión del partido disminuyó un 22%. Crédito: Shutterstock | Shutterstock

Pese a un año de significativos aumentos en el sector de los alimentos donde los precios generales subieron un %11 para este nueva temporada de la Super Bowl, los bolsillos de los fanáticos podrán tener un respiro ya que la mayoría de los bocadillos y aperitivos que se consumen durante la gran fiesta del duelo final han disminuido un 20%.

Los aficionados este domingo no solo se preparan para contemplar el encuentro entre los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles, también lo hacen para disfrutar de los típicos snacks que se consumen durante su transmisión, por ejemplo; el precio de las alitas de pollo disminuyeron un 22% en comparación con el año anterior, ubicándose a $2.65 dólares a principios de enero.

El guacamole uno de los favoritos de los fanáticos de la Super Bowl también se podrá consumir a un bajo costo, ya que los precios de los aguacates en el mercado disminuyeron un 20% gracias a la mejora en las cadenas de suministro. Por su parte, el precio del bistec de solomillo alcanzó los $10 dólares, lo mismo para el tocino. En este sentido, el valor de las hamburguesas han tenido una tendencia a la baja.

Para los que buscan preparar las clásicas bandejas de vegetales y verduras, también los precios se han reducido en los últimos meses, al igual que los camarones que dado la disminución de la demanda el costo ha estado en picada.

En cuanto a las bebidas típicas para la temporada de fútbol como los refrescos y cervezas algunos productos se han elevado mientras que otros se mantienen, por ejemplo las gaseosas subieron un 25% respecto al año anterior, pero el alza no es tan notoria y en los supermercados se pueden adquirir a $2 dólares. La cerveza por su parte aumentó un %11 pero se debe a las altos costos por fabricación y distribución. Otras bebidas como el vino mantienen su precio en el mercado.

De acuerdo con la Federación Nacional de Minoristas para esta 57ª edición de la Super Bowl, se espera que el gasto alcance los $16,000 millones en refrigerios, bebidas y otros artículos frente a los $14,600 millones de dólares en consumo del año pasado, ya que se prevé que 192,9 millones de personas vean el partido.

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