Un alto al fuego para poner fin a cinco días de enfrentamientos entre Israel y los militantes de la Yihad Islámica Palestina (PIJ, por su sigla en inglés) en Gaza ha generado esperanzas en la conflictiva región de Medio Oriente.
La tregua tuvo un comienzo inestable, ya que ambos bandos siguieron disparando durante dos horas después de que comenzara el acuerdo el sábado por la noche.
Al menos 33 palestinos murieron desde el martes en Gaza, donde Israel afirma haber atacado objetivos de PIJ.
Mediante el lanzamiento de cohetes hacia Israel, los palestinos mataron a dos personas, una israelí y una palestina que trabajaba en el país.
Los esfuerzos de mediación fueron encabezados por Egipto, que instó a ambas partes a adherirse al acuerdo de alto al fuego.
Los bombardeos de cohetes palestinos hicieron sonar las sirenas de advertencia en el sur de Israel, cerca de Gaza, y los suburbios de la ciudad de Tel Aviv justo antes de que la tregua entrara en vigor a las 22:00 hora local (19:00 GMT) del sábado.
Minutos después de que supuestamente comenzó la tregua, los militantes palestinos lanzaron más cohetes contra las comunidades del sur de Israel y el ejército israelí llevó a cabo ataques aéreos contra lo que dijo que eran dos lanzacohetes de PIJ en Gaza.
Más disparos de cohetes alrededor de las 23:00 provocaron otra ronda de ataques aéreos.