Crean hidrogel capaz de absorber agua del aire en el desierto
Este hidrogel, un nuevo material superabsorbente desarrollado por ingenieros del MIT, puede absorber cantidades "récord" de vapor del aire en condiciones realmente áridas.
Se trata de un avance con el potencial para mitigar problemas de abastecimiento de agua en las zonas más áridas de nuestro planeta. Crédito: Jonathan Wood | Getty Images
Ingenieros del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) en Estados Unidos desarrollaron un innovador material superabsorbente y de bajo costo capaz de absorber cantidades “récord” de agua del aire desértico.
De acuerdo con la institución, se trata de un innovador hidrogel transparente en forma de burbuja que posee propiedades altamente absorbentes en para extraer vapor de aire en condiciones muy áridas, ubicándolo como un avance con el potencial para mitigar problemas de abastecimiento de agua en las zonas más áridas de nuestro planeta.
This salty gel could harvest water from desert air: A new material developed by MIT engineers exhibits “record-breaking” vapor absorption. https://t.co/MiGKqnMPFK pic.twitter.com/91KaenBwMV
— Massachusetts Institute of Technology (MIT) (@MIT) June 15, 2023
El compuesto puede absorber y retener una cantidad de humedad sin precedentes, hasta 1.79 gramos de agua por gramo de material. Incluso en condiciones muy secas, con un 30% de humedad relativa, el material lograría absorber el vapor del aire puesto que tiene la capacidad de hincharse para ampliar su capacidad, una propiedad que mejoró luego de infundirlo con cloruro de litio, un tipo de sal capaz de absorber más de 10 veces su propia masa en humedad.
De acuerdo con Carlos Díaz-Marín, coautor de la publicación, “cualquier desierto Durante la noche tendría esa baja humedad relativa, así que es plausible que el material pueda generar agua en el desierto”.
Aplicaciones del gel superabsorbente
Un siguiente paso sería potenciar su fabricación hasta que el hidrogel sirva como captador pasivo de agua en regiones desérticas y propensas a la sequía, donde el material actuaría absorbiendo la baja humeada del aire de manera continua, para después ser condensada en agua potable.
Un segundo uso, señalan los autores, bien podría ser en la industria de los electrodomésticos, puntualmente en los sistemas de aire acondicionado, al poder considerarse como elemento deshumidificador de bajo consumo energético.
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