Cómo saber si tienes trastorno afectivo estacional

Investigadores han descubierto un innovador tratamiento para el Trastorno Afectivo Estacional (TAE) mediante terapia con luz pulsada de baja intensidad, ofreciendo esperanza a quienes luchan con la depresión invernal. Este enfoque prometedor podría revolucionar el tratamiento del TAE, proporcionando una alternativa efectiva a las terapias convencionales

Cómo saber si tienes trastorno afectivo estacional

Los afectados experimentan irritabilidad, dificultad para levantarse de la cama, pérdida de interés en actividades cotidianas. Crédito: Maridav | Shutterstock

En medio de los días más oscuros y fríos del año, muchos experimentan una sensación de desánimo, pero para algunos, esto va más allá de una simple melancolía invernal. El trastorno afectivo estacional (TAE), también conocido como depresión invernal, es una condición clínica que afecta a las personas de manera cíclica, generalmente durante los meses más fríos.

El TAE se manifiesta con síntomas similares a los del trastorno depresivo mayor, incluida una disminución pronunciada del estado de ánimo y los niveles de energía. Aunque ocasionalmente puede surgir en primavera o verano, es más prevalente en los meses invernales.

Los afectados experimentan irritabilidad, dificultad para levantarse de la cama, pérdida de interés en actividades cotidianas y un aumento del apetito, a menudo con una preferencia por alimentos ricos en calorías y carbohidratos, lo que puede llevar al aumento de peso.

La identificación precisa del TAE puede ser desafiante, ya que los síntomas se superponen con otras condiciones de salud mental. En este sentido, el Cuestionario de Evaluación de Patrones Estacionales (SPAQ), desarrollado en 1984, se presenta como una herramienta útil para evaluar los cambios de humor y apetito a lo largo del año.

Sin embargo, no es concluyente y se recomienda que aquellos con puntuaciones inusualmente altas busquen la evaluación de un profesional de la salud.

Los médicos realizan análisis adicionales, como pruebas de sangre para evaluar los niveles de hormona tiroidea, y un hemograma completo, para confirmar el diagnóstico y descartar otras condiciones. El proceso de diagnóstico suele requerir fluctuaciones estacionales notables en los síntomas a lo largo de varios años.

Una vez diagnosticado el TAE, se ofrecen diversas opciones de tratamiento. Los cambios en el estilo de vida, como el ejercicio regular, una dieta saludable y la exposición al aire libre, son recomendaciones iniciales.

Ayuda para tratar el trastorno estacional

La fototerapia, que implica la exposición a la luz emitida por una caja de luz diseñada para imitar la luz solar, también es común. Además, las terapias de conversación y en algunos casos medicamentos antidepresivos, son considerados según la gravedad de la condición.

Aunque aún no se comprenden completamente las causas exactas del TAE, se sugiere que la falta de luz solar podría interferir con neurotransmisores clave como la serotonina y la melatonina, que regulan el estado de ánimo y el sueño, respectivamente. La prevalencia del TAE en latitudes más altas, donde los inviernos son más fríos y oscuros, respalda esta teoría.

Sin embargo, el TAE no discrimina en función de la ubicación geográfica, por lo que se aconseja a aquellos que experimentan cambios notables en el estado de ánimo durante los cambios estacionales que busquen orientación médica.

Investigadores han descubierto que la terapia con luz pulsada de baja intensidad (LPLI) puede proporcionar alivio significativo a los afectados. Esta terapia implica la exposición a pulsos de luz de baja intensidad, que se ha demostrado que estimulan la producción de serotonina y mejoran el equilibrio hormonal.

Los primeros estudios clínicos han mostrado resultados prometedores, con una notable mejoría en los síntomas de los participantes tratados con LPLI. Este enfoque novedoso ofrece una alternativa a las terapias convencionales y podría ser un cambio de juego en el tratamiento del TAE.

Aunque aún se necesita más investigación para validar completamente la eficacia de la terapia con luz pulsada de baja intensidad, este descubrimiento ofrece esperanza a aquellos que luchan contra el TAE. Los profesionales de la salud esperan que este nuevo enfoque revolucione el tratamiento de esta condición, brindando una opción más efectiva y accesible para aquellos que buscan alivio durante los meses más difíciles del año.

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