Las cadenas de comida rápida están sintiendo la presión de los consumidores por los altos precios
Los informes de Yum Brands empresa matriz de Pizza Hut, Taco Bell y KFC mostraron una fuerte caída de las ventas en el último trimestre
Las cadenas de comida rápida están optando por precios más asequibles Crédito: WATSON/AFP | Getty Images
Ante el aumento de los precios de los alimentos por la inflación, las cadenas de comida rápida están sintiendo la presión de los consumidores quienes están retrocediendo provocando en el último año una fuerte caída en las ventas.
Gran parte de las compañías están implementando planes de venta llamativos y a precios asequibles con el fin de atraer a los consumidores quienes afectados económicamente optan por la comida hecha en casa.
Al respecto, Yum Brands empresa matriz de Pizza Hut, Taco Bell y KFC indicó que en su último informe las ventas cayeron más de lo esperado aunque las acciones subieron un 3%, la visita de sus clientes ha sido realmente baja igual que su competencia.
Por ejemplo, McDonald’s recientemente anunció un plan de asequibilidad para este año tras las reacciones negativas de los consumidores por el aumento de precios, además de realizar cambios en el menú con el fin de tener más calidad en sus productos.
El director ejecutivo de Yum Brands David Gibbs señaló que “esta tendencia de consumo ha continuado en el primer trimestre y esperamos que el impacto en las ventas disminuya en el transcurso de 2024”, dijo.
Hasta los momentos, Yum Brands es la tercera empresa de este sector que da a conocer en su informe datos de ventas decepcionantes a medida que los consumidores evalúan mejor sus gastos excepcionales.
Gibbs, menciona que las “ventas principales de las cadenas se vieron afectadas por el conflicto en la región de Medio Oriente con diversos grados de impacto”, dijo. Mientras que el director ejecutivo de McDonald’s Chris Kempczinski expresó que “comer en casa se ha vuelto más asequible. El campo de batalla ciertamente es el consumidor de bajos ingresos”.
Durante el 2023, los precios de los alimentos aumentaron solo un 1.3% y según el informe del Índice de Precios al Consumidor la comida afuera representó un aumento de 5.2%, por lo que quienes realmente están sintiendo la presión son los consumidores de bajos ingresos la base más grande de clientes de las cadenas de comida rápida.
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