Gobernadora de Arizona pretende cerrarle el paso a los carteles de la droga en la frontera limítrofe con México

Katie Marie Hobbs, gobernadora de Arizona, afirma que durante el gobierno de Donald Trump mantendrá a los soldados de la Guardia Nacional resguardando la frontera y de esa manera enfrentará a los carteles de la droga que ingresan fentanilo, cocaína y heroína desde México.

Durante una conferencia de prensa efectuada en Nogales, Arizona, la demócrata de 54 años anticipó estar dispuesta a trabajar con el político republicano que gobernará a la nación por segunda ocasión, esto con el objetivo de recibir más apoyo financiero para blindar los pasos limítrofes con el vecino del sur.

Hobbs está convencida en que, con mayor apoyo, puede cerrarle la puerta al tráfico de drogas como ya lo han demostrado al decomisar 6 millones de pastillas fentanilo y 1,400 libras de heroína y cocaína.

“Esta crisis está pasando en estos momentos y requieren acción inmediata. El uso de la Guardia Nacional ayuda a incrementar la vigilancia en la frontera y proporciona asistencia esencial a otras agencias”, mencionó ante la presencia de varios medios informativos.

Cabe mencionar que los integrantes de la Guardia Nacional asignados para vigilar la frontera no detienen a inmigrantes indocumentados, pues su principal labor consiste en detectar cargamentos de droga que de manera escondida se pretenden introducir a territorio estadounidense para surtir a los adictos en distintas ciudades.

La mandataria estatal dejó que mantendrá a los 170 miembros de la Guardia Nacional en la franja fronteriza y espera llevar una relación de cooperación con la nueva administración federal a partir del próximo 20 de enero, una vez que Donald Trump comience a despachar desde Washington.

“Así como trabajamos con la presente administración, trabajaremos con la próxima si esto significa recibir los recursos y más personal para incrementar la seguridad en nuestra frontera“, subrayó.

Cuestionada sobre las deportaciones masivas anunciadas por el magnate conservador de 78 años con apoyo de las Fuerzas Armadas, Katie Hobbs se negó a emitir comentarios sobre todo porque durante los últimos cuatro años los demócratas estuvieron más abiertos a la posibilidad de, en algún momento, legalizar a un amplio sector de trabajadores que llevan años trabajando en beneficio de la economía estadounidense.

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