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Tesla enfrenta nueva investigación por conducción remota

Una investigación federal se cierne sobre Tesla tras varios reportes de accidentes vinculados con su sistema de conducción remota, “Actually Smart Summon”

Tesla Model S

Tesla Model S. Crédito: Tesla. Crédito: Cortesía

A lo largo de la última década, Tesla ha liderado la revolución de los vehículos eléctricos con un enfoque audaz hacia la automatización de la conducción. Pero este mismo espíritu innovador ha llamado la atención de los reguladores federales, quienes ahora cuestionan si algunas de sus funciones más avanzadas pueden poner en peligro a los usuarios y peatones.

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En un nuevo episodio de vigilancia tecnológica, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés) ha iniciado una investigación formal sobre más de 2.6 millones de autos Tesla equipados con el software Full Self-Driving (FSD).

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Este examen no se centra en la conducción autónoma completa, como muchos podrían suponer, sino en una función específica del sistema FSD que ha cobrado notoriedad por su uso controvertido: la herramienta Actually Smart Summon, diseñada para permitir a los conductores convocar su vehículo a distancia a través de la app móvil de Tesla.

A simple vista, parece una característica sacada de una película de ciencia ficción: el auto sale solo del estacionamiento y se acerca al dueño. Sin embargo, en la práctica, los resultados han sido mixtos.

Varias grabaciones muestran vehículos maniobrando torpemente o incluso causando colisiones menores. Y son precisamente esos reportes los que han llevado a las autoridades estadounidenses a tomar cartas en el asunto.

Tesla Model 3
Tesla Model 3. Crédito: Tesla.
Crédito: Cortesía

¿Qué modelos están bajo análisis?

La investigación de la NHTSA abarca los siguientes modelos fabricados entre 2016 y 2025:

  • Model S
  • Model X
  • Model 3
  • Model Y

Todos ellos con el sistema opcional Full Self-Driving, que actualmente tiene un precio de $12,000 dólares. Esta opción incluye múltiples funciones de conducción asistida, entre ellas el ya mencionado Actually Smart Summon, que Tesla promociona como una evolución del Summon básico al permitir mayor autonomía en maniobras dentro de estacionamientos.

¿Qué se está evaluando?

La investigación abierta por la NHTSA no es menor. Los aspectos técnicos que están siendo revisados son amplios y delicados:

  • Velocidad máxima permitida durante el uso del Smart Summon
  • Fiabilidad del sistema en entornos públicos, no cerrados
  • Capacidad del conductor para mantener línea de visión directa con el vehículo
  • Estabilidad y latencia de la conexión entre la app y el auto
  • Reacciones del sistema ante obstáculos o condiciones inesperadas

Uno de los puntos que más preocupa a los reguladores es que algunos conductores han utilizado la función en calles abiertas o estacionamientos concurridos, donde el margen de error es mínimo y el riesgo para peatones es alto.

Precedentes y advertencias anteriores

Tesla no es nueva en lo que respecta a la presión regulatoria. En octubre de 2024, la NHTSA ya había iniciado una revisión sobre el Full Self-Driving tras una serie de accidentes, uno de ellos con consecuencias fatales.

Esta investigación, centrada en maniobras de giro no anticipadas, se sumó a una creciente lista de observaciones sobre el comportamiento del sistema en el mundo real.

El caso más sonado, no obstante, ocurrió en diciembre de 2023, cuando Tesla se vio obligada a implementar un recall de más de dos millones de vehículos.

El Tesla Model Y es la referencia del Tesla Model Q
El Tesla Model Y es la referencia del Tesla Model Q. Crédito: Tesla.
Crédito: Cortesía

La acción, gestionada mediante una actualización over-the-air, introdujo nuevas alertas visuales y sonoras para garantizar que los conductores mantuvieran la atención en la carretera. Pese a estas acciones, los reguladores aún no están satisfechos.

El papel de Elon Musk y la reacción de Tesla

Hasta ahora, Tesla no ha emitido declaraciones oficiales sobre esta nueva investigación. Sin embargo, Elon Musk, CEO de la compañía, ha sido un defensor acérrimo del FSD y sus capacidades.

En varias ocasiones ha señalado que las críticas están motivadas por el miedo al cambio y por un entorno regulatorio que, en sus palabras, “no entiende el ritmo de la innovación”.

En una entrevista reciente, Musk afirmó: “La conducción autónoma completa no es perfecta, pero es estadísticamente más segura que el conductor humano promedio. El tiempo lo demostrará”.

Sin embargo, ese “tiempo” parece no llegar del todo, al menos no para las autoridades. La NHTSA está claramente preocupada por la posibilidad de que las funciones de Tesla estén siendo utilizadas de manera imprudente o sin suficiente supervisión.

Reacciones del mercado y de los usuarios

Tras el anuncio de la investigación, las acciones de Tesla cayeron un 1.9% durante las operaciones previas a la apertura de Wall Street. Analistas del sector consideran que, más allá del impacto inmediato en el valor bursátil, esta revisión puede tener consecuencias más profundas.

Por su parte, algunos usuarios de Tesla se han mostrado divididos. Mientras que los fanáticos defienden la libertad de usar tecnologías pioneras, otros han expresado su preocupación en foros y redes sociales ante fallos que, aunque aislados, pueden poner en peligro a terceros.

¿Qué consecuencias podría haber?

De confirmarse deficiencias graves en la función Smart Summon, Tesla podría verse obligada a restringir o modificar su uso.

Las actualizaciones over-the-air seguirán siendo la herramienta principal para responder a requerimientos de la NHTSA, pero los analistas no descartan la posibilidad de sanciones o limitaciones más severas si se detecta negligencia.

Sede de ventas de Tesla
Sede de ventas de Tesla. Crédito: Tesla.
Crédito: Cortesía

Para los propietarios actuales de modelos Tesla con Full Self-Driving, esto podría significar:

  • Cambios en la configuración de uso del Smart Summon
  • Requisitos adicionales de visibilidad y distancia
  • Alertas más estrictas sobre condiciones inseguras
  • Posibles desactivaciones temporales

Tesla, como ha ocurrido en el pasado, puede lanzar modificaciones de software en cuestión de días. Sin embargo, la presión regulatoria también está haciendo que otras marcas reconsideren la forma en que implementan sus funciones semiautónomas.

Un punto de inflexión para la conducción autónoma

La controversia en torno al Full Self-Driving y el Smart Summon podría marcar un antes y un después en la evolución de la conducción autónoma. Mientras que Tesla empuja los límites de lo que un automóvil puede hacer por sí solo, los reguladores y parte del público piden más cautela.

El caso actual no solo afectará a Tesla, sino que será observado de cerca por fabricantes como Mercedes-Benz, Waymo o Apple, todos ellos interesados en liderar la carrera por el auto sin conductor.

El debate es claro: ¿Hasta qué punto debemos permitir que la tecnología avance sin intervención humana? ¿Y qué nivel de error es aceptable en nombre del progreso?

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