Este América es tan gris que su individuo de mayor estrellato tal vez lo sea La Volpe
La tendencia de unas Águilas sin reales figuras que vendan boletos toca fondo
Desde que Ricardo Peláez fue designado presidente deportivo del América, a finales de 2011, el equipo “más amado y más odiado” de México cambió su inestable rumbo.
Las Águilas volvieron a enfocarse en el futbol, a nivel de cancha, con decisiones certeras empezando por el fichaje de Miguel Herrera como director técnico apenas había llegado Peláez a Coapa.
Los resultados positivos llegaron casi de inmediato a la par de un proceso sólido. Un año y medio después, el América hizo historia con su emocionante triunfo sobre Cruz Azul en la final del Clausura 2013, teniendo todo en contra, para lograr su campeonato de liga número 11.
En ese equipo figuraban hombres como Aquivaldo Mosquera, Diego Reyes, Raúl Jiménez, Miguel Layún y “Chucho” Benítez, además de Moisés Muñoz, Paul Aguilar y Rubens Sambueza.
Otro año y medio más tarde, ahora con Antonio Mohamed en el timón, las Águilas clavaron sus garras en el título 12, frente a los Tigres.
Pero ya desde entonces empezó a notarse en el equipo millonario de México una tendencia que a muchos no les gusta: la falta de verdaderos futbolistas estrellas.
Y así llegamos al Clásico mexicano de este jueves, el América–Guadalajara de Liguilla en el Día de Acción de Gracias en Estados Unidos.
Un Clásico que seguramente será atractivo y apasionante. Eso casi nunca falla. Pero no se puede negar que ambos equipos, y especialmente el de Coapa, carecen de figuras de impacto.
Isaac Brizuela, Alan Pulido, Carlos “Gullit” Peña y Orbelín Pineda son los jugadores más destacados del Rebaño. Ninguno tiene la estatura deportiva ni mediática que en otros tiempos recientes gozaron Oswaldo Sánchez, Carlos Salcido, “Bofo” Bautista y Omar Bravo.
En América, el contraste es grande respecto a la historia pudiente y hasta presuntuosa del club azulcrema. De los tiempos de Reinoso y Borja, a la era de oro con Zelada, Tena y Zague, y más recientemente el incomparable Cuauhtémoc Blanco, los Zamorano, los Benítez, etc.
En el actual plantel americanista los cinco jugadores más reconocibles posiblemente sean Oribe Peralta, quien se ha ido apagando, Silvio Romero, Darwin Quintero, Rubens Sambueza y Moisés Muñoz.
Ninguno de ellos tiene un estatus de gran estrella ni ha tenido un torneo Apertura espectacular; seguramente ninguno puede ser considerado el mejor de la Liga MX en su respectiva posición, aunque tal vez varios de ellos llegaron a serlo, y ninguno llegará más alto de lo que lo ha hecho. En otras palabras, son buenos jugadores, con trayectoria, pero difícilmente un aficionado compra un boleto con la idea de ir a ver jugar a alguno de ellos.
Seguramente es el técnico del equipo, Ricardo La Volpe, el nombre propio de más peso que hay en el plantel.
Está por verse si este América del centenario, de magra celebración y escaso brillo, puede sobrevivir a las hambrientas Chivas en el Clásico y soñar con la corona 13. En principio no se ve cómo lo segundo pueda concretarse.