América y Chivas siguen… ¡En terapia intensiva!

MÉXICO, D.F. (NTX).- América sigue sin saber lo que es ganar bajo el mando de Alfredo Tena, y ayer tuvo que venir de atrás para rescatar el 1-1 ante Morelia, en duelo que cerró la fecha 12 del Apertura 2011 en el Estadio Azteca.

Por falta de consistencia no se le puede criticar a este América, pues con Carlos Reinoso o con Tena en el banquillo, el equipo sigue siendo una caricatura que corre, lucha, pero sencillamente no funciona, y que ahora ni siquiera se le puede acusar de falta de contundencia porque generó muy pocas ocasiones.

La realidad de este América es triste, festejar su 95 aniversario de esta forma es vergonzoso, con un equipo falto de muchas cosas y fiel reflejo de lo que ocurre en la cancha y en este partido.

Apenas corría el 11′ cuando Luis Alonso Sandoval, por derecha, metió un centro a segundo poste, donde el ecuatoriano Joao Rojas recentró para Sabah, quien sólo tuvo que empujarla al fondo de las redes para dejar sin oportunidad a un indefenso Armando Navarrete.

Con el daño ya hecho, los de casa buscaron reaccionar pero, pese a que tenían la pelota, eran inofensivos con Daniel Montenegro, Ángel Reyna y el joven Raúl Jiménez.

El actual monarca de goleo fue el que más intentó hacer algo por su equipo y en dos ocasiones inquietó la meta michoacana, pero sin lograr un beneficio que se reflejara sobre la pizarra.

La primera de ellas en un centro por derecha que se fue cerrando poco a poco y que obligó al portero Federico Vilar a mandar por arriba.

Y la segunda en un disparo que iba pegadito al poste izquierdo, que obligó al sudamericano a recostarse para evitar la caída de su marco.

El “Capi” Tena necesitaba algo para generar al menos las mismas ocasiones de gol que tuvieron ante Xolos y Pumas, y ordenó los ingresos de Vicente Sánchez y de Daniel Márquez.

Eso parecía que le iba a resultar, ya que apenas en el inicio de la parte complementaria, Márquez conectó un cabezazo que Vilar, a una mano, envió fuera para evitar la caída de su marco. Sin embargo, todo fue una ilusión porque de ahí en fuera los de casa siguieron con su inoperancia.

Morelia, en su papel, esperaba el momento exacto para conseguir el segundo, pero sin perder la concentración en su cuadro bajo, que sólo con orden tuvo para controlar los endebles embates de las Águilas.

En un acto de desesperación, y ya con muy poco qué perder, el “Capitán Furia” mandó a la cancha a Isaac Acuna para que, junto con Márquez, buscara ganar todos los balones aéreos.

Estas medidas, sin embargo, parecían no tener efecto alguno hasta que Luis Noriega se hizo expulsar, algo que se combinó con un “regalito” de Federico Vilar.

Con menos de 10 minutos en el reloj, parecía que todo estaba escrito, sin embargo, en el cobro de la falta que le costó a Noriega la segunda amarilla, se originó el empate en un centro al área que el arquero de los purépechas no alcanzó a tocar, para que Juan Carlos Valenzuela conectara de cabeza y lograr el 1-1, al 84′.

Con el cielo cayéndose sobre la cancha del Coloso de Santa Úrsula, América se fue con todo en pos del triunfo, pero no pudo conseguir algo más y tuvo que conformarse con una igualada que lo aleja todavía más de la Liguilla, pero lo acerca a otro fracaso, a esa experiencia a la que sus aficionados ya están más que acostumbrados.

En la jornada 13, el Morelia recibirá al superlíder Tigres en el Morelos; en tanto que las Águilas visitarán al Monterrey en el Tecnológico.