Internet conecta a los hispanos

Los latinos en Tennessee usan la red para contactar a sus familiares

NASHVILLE, Tennessee – El negocio es una lavandería pública ubicada sobre la calle Murfreesboro, al sureste de Nashville, una de las zonas de mayor concentración de población hispana de la capital de Tennessee.

Los clientes compran detergente, colocan la ropa en lavadoras y secadoras y en máquinas lectoras de dinero cambian billetes por monedas que tintinean al caer sobre el metal. Mientras tanto, Juan Chalco abre las puertas del local que administra dentro de la lavandería: un cibercentro, al que acuden latinos.

“Vienen a usar la cabina [una estación con computadora] para conversar con sus familias, chatear con video o con audio, para leer las noticias de sus países, leer correos de sus amigos y revisar el Facebook”.

De acuerdo con Chalco, quien estudió computación en Perú, la mayoría de los internautas del cibercentro son mexicanos, hondureños, salvadoreños y guatemaltecos.

“Usan Live Messenger, Yahoo Messenger, Skype o el nuevo videochat de Facebook”, anota Chalco, quien explica que algunos de sus clientes tienen teléfonos móviles con internet pero hay cosas que no pueden hacer con sus celulares y requieren del uso de una línea fija conectada a la red.

Reina Cortés, originaria de Puebla, México, usa la lavandería pero no el cibercentro. “Tengo internet en casa y no es necesario”, afirma, a la vez que su hija de 5 años interviene para decir: “en las noches hablo con mi papi”. La niña Ashley López ve diariamente a su padre, que está en México, a través de Skype.

Cortés es parte del 79% de hogares hispanos que poseen una computadora y del 49% que tiene acceso internet de banda ancha en el estado, de acuerdo con un estudio de la organización Connected Tennessee sobre el uso de la tecnología en 2011 por parte de los grupos étnicos de ese estado.

En 2007, 62% de los hispanos de Tennessee tenía computadora y 28% servicio de banda ancha.

Gerardo Mendoza, quien opera el Ernet Cybercafe, en la calle Nolensville Pike, en otro enclave hispano del sur de Nashville, ha visto cómo los usuarios han disminuido en los seis años que tiene el servicio de uso de internet por hora. “Es que ya todos tienen computadora”, señala.

No obstante, el área de reparación de computadoras del negocio de Mendoza ha aumentado, porque de acuerdo con el empresario mexicano, la gente comete errores y los ordenadores se contagian con virus.

Tras enseñar unos pasos a sus alumnas, la maestra de baile tapatío, Leticia Herrera, afirma que la computadora le ha sido útil como referencia para sus clases de danzas. También para que su hija mayor haga las tareas de la escuela y para comunicarse con su familia en México.

“Les mandé una cámara y allá hay un cibercafé pequeño a donde ellos se llevan la cámara porque allá las computadoras no tienen cámara incorporada, no están muy avanzadas, y entonces la instalan y nos conectamos por ahí”, dice Herrera.

La instructora afirma que gasta $70 mensuales en el servicio de teléfono e internet para su vivienda, pero considera que “vale la pena, antes gastaba mucho en tarjetas [telefónicas] internacionales”.

Por su parte, Yelina Valeria, una cantante peruana radicada en ese estado, recuerda cuando gastaba entre $30 y $40 mensuales en tarjetas telefónicas. “Hoy es gratis”, asevera con una sonrisa agregando que es usuaria frecuente de Skype, Twitter y Google.

“Cuando necesito saber algo, me voy a Google y ahí está todo”, anota Valeria.

Cifras de Connected Tennessee muestran que en 2007 solo 1% de los latinos de Tennessee tenía acceso a internet desde un aparato móvil. En 2011, 48% de los hispanos dispone de esa facilidad en sus celulares.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain