Galería de arte en Boyle Heights cierra tras controversia por ‘gentrification’
La apertura de varios espacios de arte en el barrio ha generado controversia porque se teme que haga subir el precio de la vivienda
La galería PSSST, que abrió en septiembre del año pasado en East 3rd Street, se ha visto obligada a cerrar sus puertas tras una ola de protestas de grupos locales de Boyle Heights que se autodeclaran antiaburguesamiento.
El vecindario de Boyle Heights, de mayoría latina, ha visto recientemente la apertura de una serie de espacios de arte en el área comercial al este de la autopista 101. Algunos residentes locales temen que la presencia de estas nuevas galerías provoque un aumento en el precio de la vivienda de la zona, por lo que se oponen a ellas.
Según compartieron los creadores de PSSST en un comunicado publicado el martes en su página web, fue el acoso online y en persona que esta clase de opositores llevaron a cabo contra ellos y los artistas que alojaban en el espacio lo que les ha llevado a tener que cerrar la galería.
“La continua persecución, que era a menudo de naturaleza muy personal, fue aún más intolerable porque los artistas implicados son queer, mujeres y/o personas de color“, reza la declaración de los artistas Barnett Cohen, Jules Gimbrone y Pilar Gallego.
La Opinión intentó contactar con los fundadores de la galería, pero declinaron hacer comentarios más allá del comunicado compartido en su web.
PSSST se definía a sí mismo como un proyecto sin ánimo de lucro de “artistas apoyando a otros artistas”, que buscaba dar visibilidad a colectivos infrarrepresentados en el mundo del arte.
Sin embargo, declaran, son “incapaces éticame y financieramente de seguir adelante con su misión” como consecuencia de una concepción popular que denuncian equivocada de los espacios artísticos como “algo opuesto a las comunidades variadas y multidisciplinares que queríamos apoyar”.
Por eso, escriben los afectados, “aunque nuestro cierre pueda ser aplaudido por algunos, no es una victoria de discurso civil o construcción de coalición en un momento en que ambos escasean”.
Y hay quienes en efecto celebran el cierre de la joven organización: el grupo conocido como Defend Boyle Heights, que ha expresado reiteradamente su oposición a los espacios de arte recientemente inaugurados en el barrio, escribió en su perfil de Facebook que “esperamos que el resto de las galerías sigan el ejemplo de PSSST y se marchen“.
También declararon que se mantendrían atentos al futuro uso que el propietario hará del espacio de 5,000 pies cuadrados que hasta ahora ocupaba PSSST y que “organizarían a la comunidad para resistir”.
En un comunicado, otro grupo conocido como Boyle Heights Alianza Anti Artwashing y Desplazamiento (BHAAAD) exigía también que las otras galerías abandonaran su actual ubicación y animaba a los artistas a negarse a participar en ellas, a sus inversores a cortarles la financiación y a todos los comerciantes a dejar de traer negocios a Boyle Heights.
Lo que el barrio necesita, dice la declaración, es “vivienda asequible, alojamiento para indigentes y gente desplazada por el aburguesamiento, una lavandería, un centro de intercambio de jeringuillas, una tienda de comestibles asequible, etc” y consideran que la inversión en espacios de arte sin ánimo de lucro en lugar de dichos servicios para la comunidad es una estrategia para “canalizar la filantropía hacia la destrucción de los vecindarios”.
PSSST y otros espacios artísticos han sido víctimas de vandalismo que actualmente está siendo investigado por la policía de Los Ángeles, incluyendo un incidente en que alguien realizó un graffiti en una de las galerías que rezaba “Fuck White Art”, y que según recoge el Los Angeles Times son considerados posibles crímenes de odio.