Mantenimiento: cómo cuidar el embrague de tu auto
En el caso de llevar transmisión manual.
Hoy en día son pocas las personas que prefieren la transmisión manual por encima de las demás alternativas. Las cajas CVT, por ejemplo, además de no presentar ese “escalonamiento” de las distintas marchas, contribuyen a mejorar el rendimiento de combustible. Hay otros casos como la de doble embrague que funciona como si fuera automática y aquellas que son semi manuales y que no demandan la clásica utilización del pedal del clutch (o embrague). Pero siempre nos quedará el uso de la transmisión manual tradicional donde se requiere de un pie izquierdo calculador para sacarle el mejor fruto al sistema.
1 Nunca dejes el pie sobre el pedal del clutch o embrague. No importa si está puesta la velocidad o no, la mínima presión hace que el disco del embrague trabaje y seguro durará menos de lo esperado. Para eso están los reposa pies laterales.
2 Si te detienes en una colina, de subida, no utilices el clutch mientras el auto no se mueve. Desengancha la marcha y utiliza el freno. Cuando el tráfico avance, entonces sí enganchas el cambio y trabajas con el embrague para avanzar.
3 Si el tráfico es muy intenso y no te da tiempo de cambiar a segunda velocidad. No avances centímetro a centímetro, y mejor avanza varios metros cada vez. Claro, el riesgo es que la gente aprovechará el hueco que dejas entre tu auto y el del frente, y probablemente se irán metiendo delante de ti.
4 Quita la velocidad sin utilizar el embrague. No es nada difícil, pero hay que tener el tacto suficiente para hacerlo bien. El auto no puede ir acelerando cuando intentes quitar la marcha, de hecho, lo mejor es que ya sólo vaya avanzando con la inercia.
5 Finalmente, no hagas arrancones. Si hay una forma de destrozar el embrague es haciendo carreras. La demanda al disco hace que la pasta se termine más pronto de lo esperado. Y sí, las reparaciones no son baratas.