España se ve presionada por sus bancos
Sobre el país se cierne la amenaza de la bancarrota debido a recesión
MADRID, España (AP).- España está bajo intensas presiones para encontrar un salvamento para sus atribulados bancos.
A políticos en Europa e inversionistas en todo el mundo les preocupa que el país, afectado por una recesión, no pueda conseguir el dinero necesario para salvar sus bancos sin poner en bancarrota las finanzas públicas. Y están aumentando las expectativas de que los líderes españoles van a verse obligados a pedir un rescate internacional para bancos que se están desplomando bajo el peso de malos préstamos de bienes raíces.
En momento en que las autoridades del país pasan trabajos para encontrar una solución a la crisis, los costos de préstamos en la nación se han disparado a niveles cercanos a los que forzaron a Grecia, Portugal e Irlanda a solicitar rescates financieros.
Pudieran ser necesarios hasta 100,000 millones de euros (126,000 millones de dólares) para estimular los bancos españoles, dijo el jueves la agencia de calificación de crédito Fitch. La agencia, que previamente había dicho que eran necesarios 30,000 millones de euros, rebajó la calificación de la deuda española a apenas por encima de bonos basura y advirtió que nuevas reducciones eran posibles.
España vendió el jueves 2.000 millones de euros (2,520 millones de dólares) en bonos, pero tuvo que pagar a los inversionistas tasas de interés mucho más altas que en ventas previas. Existe un sentimiento creciente de que a España y sus bancos se les está acabando el tiempo.
El mismo día, el presidente del gobierno Mariano Rajoy pareció no descartar de manera tajante la necesidad de ayuda externa para el sistema financiero español y aseguró que una vez se conozcan los requerimientos reales de la banca tomará la decisión más favorable para el país.
Rajoy evitó especular sobre el forado del sector bancario, que algunos analistas cifran entre 60,000 y 160,000 millones de dólares para cubrir una cartera estimada de 180,000 millones de euros (223,950 millones de dólares) en activos tóxicos, créditos e hipotecas en riesgo de impago vinculados al colapso de la construcción.
El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, situó la recapitalización en 40,000 millones de euros (49,700 millones de dólares).
Rajoy aseguró que esperará a los resultados del informe que está elaborando el Fondo Monetario Internacional, FMI, previsto para el 11 junio, y a las evaluaciones externas de la banca encargadas a sendas empresas auditoras de Alemania y Estados Unidos.
“Una vez que nosotros conozcamos lo que nos dicen los evaluadores independientes y una vez que hayamos hablado con todos nuestros socios europeos, tomaremos la decisión que sea mejor para los intereses generales de los españoles”, dijo Rajoy el jueves en una rueda de prensa junto a su homólogo holandés, Mark Rutte.
“El Gobierno tiene un plan perfectamente definido y este plan es el que al final acabará por conseguir que salgamos de la situación en la que estamos en este momento”, agregó.
El problema español también es europeo y ha vuelto a generar dudas sobre la viabilidad del euro como moneda.