Fiesta de “sangre” en casa de lujo Airbnb fue resultado de lucha de pandillas en California
Cinco jóvenes, de entre 19 y 29 años, perdieron la vida; y otros cinco, resultaron heridos
Escena del crimen acordonada por la Policía. Crédito: Getty
Un “baño de sangre” en en el medio de una fiesta de Halloween en el que participaron pandillas rivales y gente “con intención de hacer daño”: así la policía describió el tiroteo con cinco muertos ocurrido el pasado 31 de octubre en lujoso barrio de Orinda, a pocas millas de San Francisco, California.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 10:50 p.m. de ese jueves festivo en una casa alquilada por la plataforma Airbnb. De repente, se escucharon múltiples disparos; alguien alertó a la Policía.
Los agentes que acudieron a la escena del crimen se encontraron el caos: había personas golpeadas fatalmente por balas de arma de fuego, algunos heridos, y muchos participantes en la fiesta huyendo, según relataron. En el evento había más de 100 personas.
Cinco jóvenes, de entre 19 y 29 años, perdieron la vida. Las víctimas mortales fueron Tiyon Farley, de Antioch; Omar Taylor, de Pittsburg; Raymon Hill Jr., de San Francisco y Oakland; Javlin County, 29, de Sausalito y Richmond; y Oshiana Tompkins, 19, de Vallejo y Hercules.
Otras cinco personas, según han informado las autoridades esta semana, resultaron heridas, tres de ellas por el impacto de balas.
“En mis 32 años de servicio, nunca había visto una escena de homicidio como esta”, aseguró este viernes David Livingston, alguacil del condado de Contra Costa. “Fue un baño de sangre”, añadió.
Livingston explicó que aún se investigaban las causas concretas que desencadenaron el tiroteo, pero que los investigadores saben que en la fiesta participaron pandillas rivales de San Francisco y Marin City y que estuvieron involucrados “múltiples tiradores”. En un principio, afirmó, hubo un altercado en la cocina de la casa
La policía encontró evidencias de que varias personas que estaban en el evento llevaban armas, incluido dos de los fallecidos, ambos con antecedentes penales y vinculados con las pandillas citadas. Algunos participantes fueron a la fiesta “con la intención de causar daño y conflicto”, según Livingston.
Las autoridades llevaron a cabo este jueves cinco arrestos en conexión con el suceso. Cuatro de los detenidos, identificados como Lebraun Tyree Wallace, de 28 años, y procedente de San Mateo; Shamron Joshua Mitchell, 30, de Antioch; Jaquez Deshawn Sweeney y Jason D. Iles, ambos de 20 años y de Marin City, fueron puestos bajo custodia sin fianza.
El promotor de la fiesta Devin Isiah Williamson, 21 años, de Vallejo, fue arrestado con cargos de conspiración, portar un arma oculta y vandalismo, y una fianza de 500,000 dólares.
Tras el tiroteo, Airbnb, que tiene sede en San Francisco, informó que estaba tomando medidas para prohibir fiestas no autorizadas en inmuebles en alquiler en la plataforma.
La policía sigue investigando los hechos, y, según Livingston, se espera arrestar a más personas en conexión con ellos. Mientras tanto, entre los residentes del lujoso suburbio en el que se produjo el tiroteo gana espacio la preocupación, afirmó el alguacil.
