Confirman que hay 44 estadounidenses con coronavirus encerrados en el crucero en Japón
La Organización Mundial de la salud advirtió de que es imposible predecir la evolución del brote
Al menos 44 estadounidenses en cuarentena a bordo del crucero Diamond Princess en Japón se infectaron con el nuevo coronavirus, que ha causado la muerte a cerca de 1,700 personas, dijo este domingo un alto funcionario de la salud de Estados Unidos. “No irán a ninguna parte. Estarán en hospitales en Japón“, declaró Anthony Fauci, funcionario de los Institutos Nacionales de Salud estadounidenses (NIH) a la cadena CBS. Más de 68,000 personas han sido infectadas en China desde el inicio de la crisis, pero el número de nuevos casos diarios tiende a disminuir: el domingo alcanzó la cifra de 2,009, en el tercer día de repliegue consecutivo.
En torno a 400 estadounidenses viajaban en el crucero cuando atracó en Japón. El Ministerio de Defensa del país asiático confirmó que 300 de ellos desembarcaron la noche de este domingo, para ser evacuados por Estados Unidos, donde tendrán que estar en cuarentena durante 14 días en bases militares, aunque no se haya confirmado que estén contagiados.
Matthew Smith, un pasajero estadounidense retenido en el crucero, publicó varios tuits donde se ve a los pasajeros estadounidenses abandonar el crucero.
Video of Americans boarding the coaches, in the rain pic.twitter.com/nZthvHppuY
— Matthew Smith (@mjswhitebread) February 16, 2020
Here's the Departure of the Americans pic.twitter.com/ndWXkTCG7O
— Matthew Smith (@mjswhitebread) February 16, 2020
El crucero ha estado en cuarentena desde el pasado 5 de febrero. Se espera que quienes eligen renunciar al vuelo fletado de regreso a Estados Unidos abandonen el barco el 19 de febrero, pero las autoridades han dicho que no podrán encontrar un vuelo diferente a casa hasta al menos el 4 de marzo.
Sus motivaciones para quedarse atrás han sido variadas. Algunos pasajeros tienen familiares enfermos que reciben tratamiento en hospitales japoneses. Otros temían que pudieran estar expuestos al coronavirus en el avión confinado o sencillamente se han opuesto a escapar de una cuarentena, según un informe de Reuters.
Cheryl y Paul Molesky de Syracuse, Nueva York, le dijeron a Associated Press que estaban dispuestos a arriesgarse. “Nos alegra volver a casa”, dijo Cheryl Molesky a NHK TV en Japón, informó Associated Press. “Es un poco decepcionante que tengamos que pasar por otra cuarentena, y probablemente no estaremos tan cómodos como en el Diamond Princess. El mayor desafío ha sido la incertidumbre”, explicó.
Disminución de casos
El número de nuevos casos por la epidemia del coronavirus disminuyó por tercer día consecutivo en China, donde este domingo había cerca de 1,700 muertos, mientras la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que es “imposible” predecir la evolución del brote. “Ya se puede constatar el efecto de las medidas de control y de prevención de la epidemia”, dijo el portavoz de la Comisión Nacional (ministerio) de Salud, Mi Feng.
El porcentaje de casos graves descendió a un 7,2% del total, tras tocar techo el 27 de enero con un 15,9%, según el portavoz de la Comisión, Mi Feng. El porcentaje era más alto en Wuhan, la ciudad de Hubei donde comenzó el brote, aunque cayó a un 21,6% respecto el máximo de 32,4% el 28 de enero. “Los esfuerzos nacionales contra la epidemia han mostrado resultados”, dijo Mi en la sesión informativa diaria del organismo.
La tasa de mortalidad permaneció estable con 142 nuevos decesos, según la comisión. La cifra de fallecidos en China continental a causa de la COVID-19, la enfermedad causada por una nueva forma de coronavirus, se elevó a 1,665. En total, 9,419 personas se han recuperado y fueron dadas de alta.
Más prudente se había mostrado el sábado la Organización Mundial de la Salud (OMS), al considerar que era “demasiado pronto” para hacer previsiones sobre la evolución de la enfermedad.
Según el último balance anunciado el domingo por China, la neumonía viral COVID-19 provocó la muerte de 1,665 personas, la mayoría en la provincia de Hubei. En las últimas 24 horas, han muerto 142 personas. El domingo también se registró el primer fallecimiento en Taiwán, un conductor de taxis de 61 años, se anunció oficialmente.
The total number of #COVID19 cases reported from mainland China 🇨🇳 to date is 68,500.
— World Health Organization (WHO) Western Pacific (@WHOWPRO) February 16, 2020
The figures include 11,272 severe cases and 1,665 people who have died.#coronavirus pic.twitter.com/nmQ0PknCNs
Entretanto en Europa, más de un centenar de alemanes, y una veintena de otras nacionalidades, fueron liberados de la cuarentena a la que estaban sometidos en una base militar de Fráncfort desde que fueron repatriados de Wuhan a comienzos de mes.
“Gestión cerrada”
La provincia de Hubei, donde 56 millones de habitantes están aislados del mundo desde el 23 de enero, ha restringido la libertad de movimiento de sus ciudadanos más allá de la capital, Wuhan.
Pueblos y ciudades están sometidos a “una estricta gestión cerrada”, las 24 horas del día, lo que significa que los habitantes no deben salir de sus casas hasta nueva orden. Las compras y la distribución de comida y de medicamentos se pueden hacer de manera “centralizada”, precisa una directiva provincial publicada el domingo.
La epidemia mantiene en alerta al planeta, con cerca de 600 casos de contagio confirmados en una treintena de países, incluido el primer caso en África, anunciado el viernes por Egipto.
El principal foco de infección fuera de China sigue siendo el crucero Diamond Princess, en cuarentena en un puerto de Japón, con 355 contagios a bordo, entre ellos 70 nuevos confirmados este domingo.
Imagen y legitimidad
En China, después de haber destituido el viernes a los principales responsables políticos de Hubei y de Wuhan, el Gobierno anunció el domingo sanciones a funcionarios de menor rango.
“Cuando se produce una crisis de este calado, esto tiene una importancia política, pues la imagen internacional de China y la legitimidad del Partido están en juego”, comenta el sinólogo Zhoy Xun, de la Universidad de Essex (Inglaterra).
Entretanto la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI) Kristalina Georgieva advirtió que la epidemia podría impactar el crecimiento mundial en 2020, dependiendo de la capacidad de China para contener su propagación.
“En este momento, nuestro pronóstico es de (un crecimiento mundial) de 3,3%, y podría haber una reducción de 0.1 a 0,2%”, dijo, pero admitió que es “demasiado pronto” para estimar con precisión el impacto.