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Consumo de carne roja procesada puede llevar a la demencia temprana

Se recomienda reemplazar la carne roja procesada por alimentos como nueces, legumbres o pescado

Consumo de carne roja procesada puede llevar a la demencia temprana

Se ha detectado que el envejecimiento cognitivo se aceleraba aproximadamente 1.6 años por porción diaria. Crédito: Calimedia | Shutterstock

Una dieta que involucre carne roja procesada, como tocino, salchichas, mortadela o embutidos, está asociado con un mayor riesgo de las personas de padecer demencia y deterioro cognitivo en etapas avanzadas de la vida. Si bien la demencia es una enfermedad común en adultos mayores, cientos de miles de personas son diagnosticadas con demencia temprana cada año, y este tipo de consumo alimentario es un factor disparadores, apuntan investigadores.

Así lo demostró un extenso estudio publicado en 2023 y realizado en Estados Unidos con más de 130,000 personas durante 43 años, que encontró que quienes consumían más carne roja procesada tenían un riesgo 13% mayor de desarrollar demencia en comparación con quienes consumían cantidades mínimas. A este se suma una nueva investigación publicada en enero de este año que hace hincapié en la dieta, particularmente en la carne roja procesada, como las salchichas, la mortadela o el bacon, como un factor que multiplica el riesgo de desarrollar demencia a lo largo de la vida.

Se ha detectado que el envejecimiento cognitivo se aceleraba aproximadamente 1.6 años por porción diaria promedio de carne roja procesada (alrededor de 85 gramos).

Por lo tanto, se recomienda reemplazar la carne roja procesada por alimentos como nueces, legumbres o pescado. Quienes cumplen este régimen alimentario tuvieron, según la investigación, un riesgo 19-20% menor de demencia y deterioro cognitivo subjetivo, que es una percepción de declive que puede preceder a evaluaciones objetivas.

El detalle está en el procesamiento

Mientras que el consumo de carne roja no procesada (como filetes de cerdo o de vaca) no mostró una relación significativa con el riesgo de demencia, aunque sí se observó un aumento en el riesgo subjetivo de deterioro cognitivo en quienes consumían siete o más porciones por semana en comparación con menos de tres.

Los posibles mecanismos propuestos para explicar por qué la carne roja procesada puede afectar la salud cerebral incluyen la presencia de nitritos usados como conservantes. Los mismos pueden inducir estrés oxidativo e inflamación neurotóxica, además del óxido de trimetilamina (TMAO), un producto derivado de la descomposición bacteriana de la carne, que puede favorecer la acumulación de proteínas amiloide y tau relacionadas con el Alzheimer.

También, el contenido en grasas saturadas y sal de estos productos podría perjudicar las células cerebrales.

Síntomas tempranos del deterioro cognitivo

Los síntomas tempranos de deterioro cognitivo a observar incluyen varias señales clave:

  • Olvidos frecuentes y pérdida de memoria a corto plazo, como no recordar conversaciones recientes, repetir preguntas, o extraviar objetos familiares. También puede haber desorientación en lugares conocidos.
  • Dificultad para tomar decisiones o resolver problemas cotidianos que antes se manejaban con facilidad, como pagar una factura o seguir una receta habitual.
  • Problemas para encontrar las palabras adecuadas al hablar, con pausas prolongadas, uso de palabras comodín como “esto” o “eso”, o incluso abandono de la conversación por dificultad para mantenerla.
  • Cambios en el estado de ánimo o la personalidad, como aumento de ansiedad, depresión, apatía, rechazo a la interacción social o aislamiento.
  • Dificultad para realizar tareas cotidianas que antes eran sencillas, como seguir instrucciones, manejar actividades domésticas o laborales, o completar proyectos.
  • Confusión respecto al tiempo y lugar, como equivocarse con los días o perderse en rutas familiares.
  • Problemas con el lenguaje, la percepción espacial y la organización.
  • Cambios observados por familiares, como falta de criterio o problemas en la toma de decisiones.

Estos signos pueden indicar la necesidad de consultar a un médico para una evaluación precoz y, si es el caso, iniciar un tratamiento o ajustes que mejoren la calidad de vida. Estas señales son comunes en deterioro cognitivo leve o en etapas tempranas de demencia como el Alzheimer

Alimentos alternativos saludables

Algunos alimentos específicos que se consideran saludables como alternativas a la carne roja procesada incluyen:

  • Legumbres: frijoles, lentejas, garbanzos y guisantes son ricos en proteínas, fibra y otros nutrientes. Son una opción nutritiva, económica y sostenible para reemplazar la carne.
  • Soja y sus derivados: tofu, tempeh y soja texturizada son fuentes altas en proteínas de fácil digestión y ricas en grasas saludables y vitamina E antioxidante. Son ampliamente usados como sustitutos naturales de la carne.
  • Quinoa y amaranto: son granos ricos en proteínas, hierro, magnesio, vitaminas del grupo B y otros minerales. La quinoa además es libre de gluten y contiene todos los aminoácidos esenciales.
  • Huevos: contienen proteínas de alto valor biológico y grasas beneficiosas; aportan también hierro, fósforo y vitaminas, y son una fuente económica y versátil de proteína.
  • Frutos secos y semillas: como almendras, nueces, pistachos y semillas, aportan proteínas, grasas saludables y otros nutrientes esenciales.
  • Pescado, especialmente variedades con grasas saludables como el salmón, es una alternativa proteica más saludable en comparación con la carne roja.

Estas alternativas no solo son saludables y nutritivas, sino que también suelen ser menos procesadas, bajas en grasas saturadas y colesterol, y aportan fibra dietética beneficiosa para la salud digestiva.

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