Romney busca hoy ampliar ventaja con triunfo en Illinois

Springfield — Mitt Romney, cada vez más confiado, divisaba un nuevo triunfo sobre su principal contrincante, Rick Santorum, en las elecciones primarias de hoy en el estado de Illinois, que lo colocaría más cerca de la candidatura del Partido Republicano para desafiar a Barack Obama en los próximos comicios presidenciales.

Romney y Santorum recorrieron ayer Illinois en su intento por hacerse de los 54 delegados en disputa. Ambos aspiraban a la victoria en un estado que no sólo es residencia Obama sino uno de los últimos campos de batalla importantes antes del receso de tres semanas que habrá en abril dentro de la contienda interna que se efectúa estado por estado, con elecciones primarias y asambleas partidarias.

Romney se ha dedicado a censurar las políticas económicas de Obama aun cuando el presidente ha mejorado en las últimas semanas su posición en las preferencias electorales, según las encuestas, debido a indicios de que la economía estadounidense avanza hacia una recuperación sostenida.

Sin embargo, Obama continúa vulnerable para las elecciones presidenciales de noviembre debido a la turbulencia financiera que afectó y agotó a los estadounidenses como resultado de la Gran Recesión. Obama no enfrenta contrincantes en las elecciones primarias demócratas.

La peor desaceleración en la economía de Estados Unidos desde la Gran Depresión de la década de 1930 comenzó con el casi derrumbe financiero de los últimos meses del gobierno de George W. Bush.

Romney censuró el lunes las políticas económicas de Obama y escogió de escenario para hacer sus declaraciones la mismísima universidad donde el presidente alguna vez dio clases de derecho constitucional.

“La libertad yace en las urnas este año”, dijo Romney a estudiantes y partidarios en la Universidad de Chicago. Aseguró que el país vio limitada su recuperación tras la recesión debido al “asalto contra nuestra libertad económica” que lanzó Obama. “Yo ofrezco una verdadera opción y un comienzo muy distinto”, apuntó.

Romney intenta mostrar que está más que listo, tras el desgastante proceso interno republicano, para avanzar hacia la campaña general contra Obama con vistas a las elecciones generales.

Romney, el favorito, ha conseguido más delegados para la convención nominadora nacional republicana que sus oponentes juntos y cada semana parece más seguro de lograr la candidatura presidencial ante los traspiés de la campaña de Santorum, por desorganización persistente y poco presupuesto.

Sin embargo, Romney no tiene garantizada para nada la victoria en las elecciones primarias de hoy en Illinois.

Despué de hoy, la contienda interna vira hacia Luisiana, en el sureste, una parte del país donde Romney ha tenido tropiezos. Luisiana tiene un total de 46 delegados para al Convención Nacional Republicana, pero sólo 20 estarán en disputa en las elecciones primarias del sábado.

Sin embargo, la incapacidad de Romney para sacudirse a un rival aparentemente débil como Santorum pone de relieve las dificultades de su campaña y su incapacidad para suscitar entusiasmo entre los electores republicanos.

Esta coyuntura también significa que Romney tiene que dedicar más tiempo y dinero para librar las batallas de las elecciones primarias que enfocar todas sus baterías contra Obama a fin de vencerlo.

Santorum prácticamente ha admitido que no logrará suficientes delegados para alzarse con la victoria pero asegura que se ha mantenido en la contienda, que ha sido bastante larga, porque considera a Romney un candidato débil.

Romney busca ampliar ventaja con triunfo hoy en Illinois

AP

Springfield — Mitt Romney, cada vez más confiado, divisaba un nuevo triunfo sobre su principal contrincante, Rick Santorum, en las elecciones primarias de hoy en el estado de Illinois, que lo colocaría más cerca de la candidatura del Partido Republicano para desafiar a Barack Obama en los próximos comicios presidenciales.

Romney y Santorum recorrieron ayer Illinois en su intento por hacerse de los 54 delegados en disputa. Ambos aspiraban a la victoria en un estado que no sólo es residencia Obama sino uno de los últimos campos de batalla importantes antes del receso de tres semanas que habrá en abril dentro de la contienda interna que se efectúa estado por estado, con elecciones primarias y asambleas partidarias.

Romney se ha dedicado a censurar las políticas económicas de Obama aun cuando el presidente ha mejorado en las últimas semanas su posición en las preferencias electorales, según las encuestas, debido a indicios de que la economía estadounidense avanza hacia una recuperación sostenida.

Sin embargo, Obama continúa vulnerable para las elecciones presidenciales de noviembre debido a la turbulencia financiera que afectó y agotó a los estadounidenses como resultado de la Gran Recesión. Obama no enfrenta contrincantes en las elecciones primarias demócratas.

La peor desaceleración en la economía de Estados Unidos desde la Gran Depresión de la década de 1930 comenzó con el casi derrumbe financiero de los últimos meses del gobierno de George W. Bush.

Romney censuró el lunes las políticas económicas de Obama y escogió de escenario para hacer sus declaraciones la mismísima universidad donde el presidente alguna vez dio clases de derecho constitucional.

“La libertad yace en las urnas este año”, dijo Romney a estudiantes y partidarios en la Universidad de Chicago. Aseguró que el país vio limitada su recuperación tras la recesión debido al “asalto contra nuestra libertad económica” que lanzó Obama. “Yo ofrezco una verdadera opción y un comienzo muy distinto”, apuntó.

Romney intenta mostrar que está más que listo, tras el desgastante proceso interno republicano, para avanzar hacia la campaña general contra Obama con vistas a las elecciones generales.

Romney, el favorito, ha conseguido más delegados para la convención nominadora nacional republicana que sus oponentes juntos y cada semana parece más seguro de lograr la candidatura presidencial ante los traspiés de la campaña de Santorum, por desorganización persistente y poco presupuesto.

Sin embargo, Romney no tiene garantizada para nada la victoria en las elecciones primarias de hoy en Illinois.

Despué de hoy, la contienda interna vira hacia Luisiana, en el sureste, una parte del país donde Romney ha tenido tropiezos. Luisiana tiene un total de 46 delegados para al Convención Nacional Republicana, pero sólo 20 estarán en disputa en las elecciones primarias del sábado.

Sin embargo, la incapacidad de Romney para sacudirse a un rival aparentemente débil como Santorum pone de relieve las dificultades de su campaña y su incapacidad para suscitar entusiasmo entre los electores republicanos.

Esta coyuntura también significa que Romney tiene que dedicar más tiempo y dinero para librar las batallas de las elecciones primarias que enfocar todas sus baterías contra Obama a fin de vencerlo.

Santorum prácticamente ha admitido que no logrará suficientes delegados para alzarse con la victoria pero asegura que se ha mantenido en la contienda, que ha sido bastante larga, porque considera a Romney un candidato débil.