78 horas de ¡Pesadilla!

Chelsea empata 2-2 con Barcelona en el Camp Nou y lo deja sin final de la Liga de Campeones de Europa

Lio Messi tuvo en sus botines la final, pero el travesaño le dijo que no. Con el de ayer sumó tres partidos sin anotar.

Lio Messi tuvo en sus botines la final, pero el travesaño le dijo que no. Con el de ayer sumó tres partidos sin anotar. Crédito: AP

BARCELONA, España (EFE).- Dos balones al palo, ambos de Lio Messi, uno de ellos tras fallar un penal, jugando contra 10 desde el minuto 37 y ejerciendo de dominador, el Barcelona, siendo mejor en los dos partidos -y luego de perder la Liga el sábado-, ayer no pudo clasificar a la final de la Champions al estrellarse una y otra vez en el muro levantado por el Chelsea para empatar 2-2 y perder en el global 3-2.

El gesto de desesperación de Messi, quien abatido vio cómo Fernando Torres cerraba la eliminatoria al minuto 92, es la imagen de la impotencia del Barcelona, que tenía claro cómo jugar, pero que no le acompañó la suerte.

El argentino tuvo otra noche aciaga ante el Chelsea, al que nunca ha podido batir en los ocho partidos en los que le ha enfrentado, y el penal que falló fue una prueba más de su maldición contra los londinenses.

Pero su técnico Pep Guardiola, al final del partido, lo defendió con todo.

“Hemos llegado gracias a este chico, nada más puedo agradecerle lo que ha hecho. Mi admiración es insuperable por su atrevimiento, su coraje. Es un ejemplo de competitividad, por cómo nos arrastra para ser mejores”.

“No tengo ni una duda de que [Messi] pasará unas horas malas. Pero es lo bonito de este deporte, que tiene estas cosas. Ahora toca aceptar que otro equipo irá a Munich y prepararnos para el año que viene. No siempre se puede ganar”.

Los blaugrana se pusieron 2-0 al 44′, pero cometieron dos errores en el tiempo añadido del primer tiempo y en el tiempo extra del segundo que acabaron por hundirlos al recibir dos tantos: uno de Ramires, y otro de Torres.

Lo dicho. No fue justo el futbol con el Barsa porque fue el que más arriesgó, y lo tenía todo a favor con 2-0 y un rival con 10 hombres desde el 37′, por la expulsión de John Terry.

“No sé si es la noche más triste. No lo sé, no sé muy bien lo que siento. Miro al equipo para ver qué ha hecho mal y no lo encuentro”, agregó Pep tratando de explicarse la derrota.

Si el guión parecía claro: un Barsa volcado y un rival escondido en la cueva, en poco tiempo se vino abajo. El Chelsea se quedó sin uno de sus dos centrales y el Barsa sin Piqué, quien se fue conmocionado tras un encontronazo con Valdés.

Los azulgrana, pacientes, no desesperaron. El 1-0 llegó al 35′. Un tiro de esquina, un rechace, un buen control de Alves y un centro desde la izquierda de Cuenca que remató Busquets.

Dos minutos después el mundo parecía que se le iba a caer encima a los londinenses. Una agresión de Terry sobre Alexis (37′) envió al capitán de los “Blues” al vestuario. El escenario era ideal para los catalanes.

Descolocados los ingleses en una acción de Alexis y una combinación con Messi, Iniesta puso el 2-0 al 44′. La ventaja en la eliminatoria le duró al Barça dos minutos. Hecho lo más difícil, un error de Mascherano volvió a penalizar a su equipo.

En el tiempo añadido del primer tiempo, Lampard sirvió a Ramires y el brasileño definió con exquisitez (2-1). Con 45 minutos por jugarse, el Barsa estaba por debajo en la eliminatoria, pero el rival jugaba con 10.

Cuando en el inicio del segundo tiempo Messi, que nunca le ha anotado al Chelsa, falló un penalti (49′), el Camp Nou pensó lo peor.

El Chelsea, si con 11 jugó a la defensiva, con uno menos y la eliminatoria favorable, reculó aún más. Se puso a prueba la paciencia de los de Guardiola, quienes tocaron y tocaron, abrieron el campo, buscaron las bandas con Alves y Cuenca y llegaron las ocasiones.

El partido era un ataque continuado, pero el gol no llegaba.

Marcó Alexis al 81′, anulado por fuera de juego previo de Alves; remató Messi al palo al 83′, y el Camp Nou empezó a entender que la eliminatoria se iba a escapar. Un tanto de Torres, a la contra (al 90’+2′), enterró todas las opciones del Barsa.

Al final, el técnico italiano del Chelsea, Roberto Di Matteo, reconoció su buena fortuna en rueda de prensa.

“Ha sido un partido increíble, tuvimos un poco de suerte, estoy muy contento por los jugadores porque se lo merecen. Hemos tenido una temporada muy difícil y cuando necesitamos alguna cosa muy especial la conseguimos, está en el ADN de estos jugadores”, dijo en rueda prensa Di Matteo.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain