Militares de Mali apartan del gobierno a políticos
La junta militar coloca en los ministerios de Defensa, del Interior y de Administración Territorial a personajes surgidos del ámbito castrense.
Bamako, 25 de abril.- La junta militar golpista de Mali ha logrado imponer a tres de sus miembros en las principales carteras del Gobierno de transición, anunciado hoy, que se caracteriza por su sesgo tecnócrata y la ausencia de destacadas personalidades políticas.
El coronel Yamoussa Cámara, al frente del Ministerio de Defensa, el general Tiéfing Konaté, nuevo ministro de Interior y el coronel Moussa Sinko Coulibay, titular de Administración Territorial, representan a los oficiales sublevados en el nuevo Ejecutivo, compuesto por 24 carteras.
Un gabinete que, de acuerdo con las dos principales plataformas políticas surgidas tras la asonada del pasado 22 de marzo, se ha formado sin tener en cuenta a los partidos, que han sido “totalmente ignorados”.
Según el representante de la plataforma antigolpista Frente para la Salvaguarda de la Democracia y la República (FDR), para que el Ejecutivo del primer ministro, Cheick Modibo Diarra, pueda desarrollar su programa “la clase política deberá estar comprometida y acompañar la transición”.
El FDR ya había denunciado recientemente que los militares siguen ejerciendo el poder a pesar del nombramiento de nuevas instituciones de transición.
En la misma línea se pronunció Nouhoum Keita, miembro del progolpista Movimiento Popular 22 de marzo (MP22), quien aseguró que el nuevo Ejecutivo no ha contado con los grupos que integran su plataforma.
No obstante, entre la población no son pocos los que se muestran “cansados de 20 años de gestión llevada a cabo por políticos con sus cortes de corruptos y malversadores”, como aseguró a Efe el profesor universitario Moussa Koné.
El pasado 6 de abril, los golpistas, liderados por Amadou Haya Sanogo, acordaron con la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) el regreso del orden constitucional a cambio de una amnistía y del levantamiento de las sanciones impuestas por este organismo africano.
Sin embargo, la reciente oleada de detenciones de personalidades políticas y militares cercanas al antiguo Gobierno, y la presencia de uniformados en los puestos relacionados con la defensa y la seguridad interior en el Ejecutivo, parecen indicar que el regreso de los militares a los cuarteles no será inminente.
En el primer consejo de Ministros, celebrado este miércoles, el gabinete ha marcado sus prioridades- la integridad territorial, la organización de las elecciones tras el periodo de transición, aunque no ha ofrecido fechas, la movilización de los ciudadanos y el regreso al trabajo.
Uno de los principales problemas del nuevo Ejecutivo es, en este sentido, el avance del grupo independentista tuareg Movimiento Nacional para la Liberación de Azawad (MNLA), que el pasado día 6 declaró la independencia del norte del país, un territorio de 850, 000 kilómetros cuadrados.
Aparte de los ministros de la junta, entre el nuevo Ejecutivo ha entrado Tiena Coulibaly, ex director general de la Compañía Maliense de Desarrollo Textil, y hombre cercano al primer ministro que se hace cargo del ministerio de Economía.
Al frente de la diplomacia estará Sadio Lamine, hasta ahora consejero del ministro de Asuntos Exteriores de Burkina Faso, Blaise Compaoré, que ha actuado como mediador en el conflicto.
El ministerio de Turismo y Artesanía, el de Familia y Promoción de la Mujer y el de los Malienses en el Exterior serán los únicos ocupados por mujeres que, como el resto de ministros, estaban ajenas hasta la fecha a la vida política maliense. EFE