EEUU actualiza su “lista negra” de tráfico de personas
Quita a Venezuela y mantiene a Cuba en “lista negra” de tráfico personas
WASHINGTON (EFE).- El Gobierno de Estados Unidos eliminó hoy a Venezuela de su lista de países que no hacen lo suficiente para combatir el tráfico de personas, en la que permanece Cuba, e incluyó por primera vez a Nicaragua entre los que cumplen sus obligaciones.
El “Informe sobre Tráfico de Personas 2012”, emitido hoy por el Departamento de Estado, observa “una tendencia en Latinoamérica de ampliar los esfuerzos contra la trata de personas”, según consideró el responsable estadounidense para la materia, Luis CdeBaca, en declaraciones a periodistas.
Estados Unidos mejoró este año su calificación en ese ámbito a cinco países del continente- Venezuela, Panamá, República Dominicana, Costa Rica y Nicaragua, y este último país se convirtió, junto a Colombia, en el único de la región que cumple los mínimos estándares en la lucha contra esa lacra, según el análisis.
Diecisiete países, cinco menos que en 2011, ocupan este año la “lista negra” de los que no hacen lo suficiente para frenar la trata de personas, y quedan por tanto sujetos a posibles sanciones, como la congelación de la ayuda no humanitaria y no comercial o la negativa de Estados Unidos a que reciban préstamos de instituciones multilaterales.
Venezuela se libró este año de esa posibilidad al desaparecer de la categoría en la que permanecía desde 2009 y trasladarse a una “lista de vigilancia”, que se refiere a los países que “hacen esfuerzos considerables para cumplir esas normas”, pero en los que el número de víctimas es muy elevado.
Ese cambio se debe a que el Gobierno de Hugo Chávez ha emprendido “campañas de información y capacitación”, ha condenado a dos infractores y ha identificado y ayudado a 38 víctimas en el último año, según explicó a los periodistas el responsable del Departamento de Estado para el tráfico de personas, Luis CdeBaca.
“Durante el año, la Asamblea Nacional aprobó reformas que fortalecerán el marco legal de Venezuela contra el tráfico de personas”, agregó el informe.
En cambio, Cuba permanece en la lista debido a su “falta de esfuerzos” contra el problema y a su negativa a informar a Estados Unidos sobre las supuestas condenas a infractores.
Según el informe, en la isla persiste la prostitución infantil, que no está “aparentemente penalizada” si afecta a personas de entre los 16 y los 18 años, y existen “denuncias de trabajos forzados en oficinas de Cuba en el extranjero”, donde las autoridades cubanas retienen supuestamente los pasaportes de los trabajadores para impedir que se vayan.
Junto a Cuba, ocupan esa categoría Siria, Irán, Corea del Norte, Sudán, Libia, Yemen, Arabia Saudí, Argelia, la República Centroafricana, la República Democrática del Congo, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Kuwait, Madagascar, Papúa Nueva Guinea y Zimbabue.
En el caso de Siria, se trata de la primera vez que aparece en la lista, mientras que Irán repite por séptimo año consecutivo.
En Latinoamérica, la mejora más notable se dio en Nicaragua, que entra en la categoría de países que cumplen sus obligaciones, debido a acciones como la condena a 9 infractores en el último año y el establecimiento de refugios para todas las víctimas.
Haití, por su parte, abandonó la categoría de “caso especial” tras años en la misma, debido a que “su Gobierno es ahora más estable y generalmente pacífico”, por lo que entró en la lista de “vigilancia” junto con Venezuela.
Estados Unidos calcula que hasta 27 millones de personas en todo el mundo son víctimas del tráfico de personas, un concepto que engloba a quienes están sujetos a servidumbre involuntaria, trabajo forzoso o explotación sexual, y que la secretaria de Estado, Hillary Clinton, prefiere definir con el término “esclavitud moderna”.