Eduardo Arellano Félix se declara inocente en EEUU
Al último de los hermanos fundadores del cártel de los Arellano Félix se le ordenó permanecer detenido sin derecho a fianza.
San Diego.- El narco mexicano Eduardo Arellano Félix se declaró hoy inocente de los cargos de asociación delictuosa, narcotráfico y lavado de dinero producto del tráfico de estupefacientes, bajo los cuales será juzgado en Estados Unidos.
Con el uniforme característico de los reos del Centro Metropolitano Correccional (MCC) de San Diego y esposado con una cadena unida a su cintura, Arellano Félix, de 55 años, dijo ser inocente de los cargos en su presentación inicial ante la magistrada Barbara Lynn Major.
Al último de los hermanos fundadores del cártel de los Arellano Félix se le ordenó permanecer detenido sin derecho a fianza.
La juez Major le asignó temporalmente a un abogado federal de oficio, Ryan Funcken, y el viernes próximo se revisará si Arellano Félix contrata a su propio representante legal.
Fuertemente custodiado por media docena de agentes federales, el detenido se mostró tranquilo durante su comparecencia inicial y se dedicó a escuchar al intérprete que le asignaron. Arellano Félix sólo hizo uso de la palabra para declararse inocente.
Los cargos se basan en un encauzamiento que hicieron en 2003 en San Diego los entonces procuradores de Estados Unidos, John Ashcroft, y de México, Rafael Macedo de la Concha.
Con este proceso, la corte federal en San Diego habrá juzgado a los cinco hermanos fundadores del cártel de los Arellano Félix y a todos sus lugartenientes originales, con excepción de Manuel Aguirre Galindo, quien al parecer permanece prófugo.
Eduardo es el último de los cinco hermanos que fundaron el cártel de los Arellano Félix en Tijuana, Baja California, en enfrentar a la justicia estadounidense, excepto Ramón, quien murió en una balacera en el norteño estado mexicano de Sinaloa en febrero de 2002.
Francisco Javier, alias “El Tigrillo” y el menor de los hermanos, fue capturado en alta mar frente a costas de Baja California Sur por la Guardia Costera estadounidense el 24 de agosto de 2006 y condenado a cadena perpetua en una corte de San Diego el 6 de noviembre de 2007.
Benjamín “El Min”, de 58 años, fue extraditado a California el 29 de noviembre de 2011. Por un acuerdo con la procuraduría federal evitó una potencial condena de 150 años y recibió el pasado 3 de abril una sentencia de 25 años de cárcel y una multa de 100 millones de dólares.
El mayor de los hermanos, Francisco Rafael, fue extraditado a San Diego en septiembre de 2006, luego de pasar 10 años en una cárcel en México. Fue el primer gran capo mexicano en ser extraditado a Estados Unidos.