Quetzal disfruta de la música y su nominación al Grammy (Video)
Quetzal habla de su nominación al Grammy con el disco Imaginaries.
Ha sido más que una unión de músicos a los que les gusta crear y disfrutar de la música: Quetzal es una de las muchas agrupaciones chicanas que no necesitan de grandes difusiones para vibrar.
Le basta el aplauso y admiración de la comunidad y no de las grandes masas. Su particular sonido —una fusión de rock, son jarocho, blues—, lo mezclan con una narrativa social que recorre lo cultural y lo político.
En entrevista con Quetzal Flores, fundador de esta agrupación surgida en el este de Los Ángeles en 1992, habla de su nominación al Grammy con el disco Imaginaries, en la categoría de Mejor Álbum Latino de Rock, Urbano o Alternativo —los premios se entregan el domingo— y del concierto que ofrecerán el sábado.
¿Cómo se siente el grupo y tú personalmente, con esta nominación al Grammy?
El grupo se siente feliz. Eso está bien, no me quejo. Yo más bien lo veo como un reconocimiento comunitario al trabajo que hemos hecho, la trayectoria en la música y a la comunidad a la que pertenecemos… El enfoque es la comunidad y no necesariamente la industria de la música. Premios como los Grammy, son buenos pero nuestro enfoque son los logros de la comunidad.
Pocas veces se reconoce a grupos que mezclan o tocan Son jarocho.
Sí, aunque nosotros no solo tocamos Son jarocho, como es el caso de Los Cojolites [también nominados]. No sé realmente lo que está pasando. Podría decir que es un momento en el que se están abriendo la conciencia de la industria que ya están hartos de la misma cosa y ahora estén en busca de cosas más creativas y más basadas en lo real.
¿Crees que este disco nominado es el mejor que han tenido en su trayectoria?
Me gusta el disco, y cada uno me gusta por diferentes razones. Yo no diría que es el mejor que hemos grabado. El proceso fue muy diferente a los anteriores. Yo diría que es más bien el momento.
¿Su trabajo ha sido reconocido por otros premios creados para latinos: Latin Grammy, Billboards, Premios lo nuestro…?
No, para nada.
¿Cómo ven eso?
La verdad no lo veo. Esa es otra realidad que nosotros no vivimos y no estamos en la búsqueda de esos reconocimientos. Estamos haciendo nuestra música y la manera en que la desarrollamos, en cómo hacemos nuestros conciertos, es diferente. No trabajamos así. Es lógico que no nos van a reconocer de esa manera porque no jugamos el mismo juego.
¿Sigue habiendo una disparidad con los músicos chicanos?
Esa es la batalla eterna de los chicanos. Como que no saben dónde ponernos, dónde caben, dónde venden: [cantan] en inglés, español, el sonido no es esto ni el otro; es eso siempre con los chicanos. Por eso digo que lo importante es hacer música y seguir por tu camino.
¿Cómo podría cambiarles su carrera ganar el Grammy?
Si ganamos tenemos que tener mucho cuidado cómo manejamos eso. Nos dará la posibilidad de ganar más dinero, cobrar más por las tocadas, y eso es lo que me da miedo, porque no quiero que todo el trabajo y el prestigio de lo que hemos hecho se reemplace con el prestigio de ganar un Grammy.
¿Les ha sido difícil mantenerse en esta carrera?
Sí y no. Es mucho trabajo y lucha constante lo que el grupo ha tenido que hacer, en comparación con los recursos que te puede ofrecer una disquera. Pero al mismo tiempo, como artista independiente, hay una cosa más sana en nuestro proceso. Puedes ver artistas que van por el otro camino y la verdad resulta en enfermedades emocionales, una vida alejada de la población, de la sociedad civil. A nosotros sí nos cuesta más trabajo, pero al mismo tiempo podemos seguir caminando por las comunidades. Esa conexión nos da mucho más orgullo. Es nuestra alimentación.
Háblanos del concierto del sábado.
Será una manera de celebrar nuestra existencia dentro de nuestra comunidad y con diferentes personas que nos han inspirado. Vamos a tocar y luego hablaremos de música. Más tarde nos vamos a ir a otro sitio en el Sereno y ahí vamos a tener un fandango.