Control a la venta de armas sigue en debate
Cuatro senadores analizan opciones a puerta cerrada
WASHINGTON, D. C. Un grupo bipartidista de cuatro senadores intenta calladamente encontrar una solución negociada para hacer más amplio el requisito de las revisiones de los antecedentes a quienes pretendan comprar un arma de fuego.
De los cuatro legisladores, dos pertenecen a la Asociación Nacional de Portadores de Armas (NRA) y dos tienen categoría “F” lo que significa que están a favor de la portación de armas, pero son menos radicales, según una clasificación en esa poderosa organización de cabildeo.
Un acuerdo, al que diversos participantes y cabilderos dan buenas oportunidades de concretarse, podría aportar un formidable impulso político a uno de los principales elementos que incluye el plan del presidente Barack Obama para el control de las armas.
De momento la revisión de antecedentes son obligatorias solo para los 55 mil establecimientos que cuentan con autorización federal de venta pero no para las exhibiciones, ventas de persona a persona u otras transacciones privadas.
Las conversaciones de los senadores han incluido discusiones sobre formas para alentar a los estados a que pongan más expedientes disponibles sobre salud mental en el sistema nacional y sobre el tipo de transacciones que podrían exentarse de las revisiones de los antecedentes, como las ventas entre parientes o a aquellos que tengan permiso para portar armas ocultas, dijeron personas que solicitaron el anonimato no estar autorizadas a declarar al respecto.
En las discusiones privadas participan el senador liberal Chuck Schumer, tercer líder demócrata en rango en el Senado; el senador Joe Manchin, integrante de la Asociación Nacional de Dueños de Armas y uno de los demócratas más moderados en la cámara; el senador republicano Tom Coburn, también integrante de la asociación y uno de los legisladores más conservadores en el Congreso; y el senador republicano moderado Mark Kirk.
“El proyecto que se pretende alcanzar no limitará que al tío se le pueda pedir el rifle para ir de cacería o compartir un arma con algún amigo en un campo de tiro al blanco”, dijo Schumer la semana pasada en una de las pocas declaraciones públicas que han divulgado los senadores sobre el conjunto de medidas que pretenden concertar. Según encuestas, el requisito de que se verifiquen los antecedentes en casi todas las compras de armas tiene más apoyo público que la propuesta de Obama de prohibir las ventas de armas de asalto y de cargadores de gran capacidad.