Colombia extradita a prófugo

ROMA, Italia.— Un mafioso italiano fugitivo que fue condenado por traficar cocaína a nivel mundial fue extraditado por las autoridades colombianas a Italia tras ser detenido en un centro comercial de Bogotá, informaron las policías de ambos países ayer.

La policía colombiana indicó ayer que Roberto Pannunzi tenía una identificación falsa venezolana cuando fue apresado el jueves. Agregó que Pannunzi contrabandeaba alrededor de dos toneladas de cocaína cada mes de Colombia a Europa.

Pannunzi “es por ahora el corredor más importante en el tráfico de cocaína de Sudamérica a Europa”, dijo el general Andrea De Gennaro, agente antidrogas del servicio de Aduanas de Italia, citado por la agencia italiana de noticias ANSA.

De Gennaro agregó que Pannunzi pudo “mover miles de kilos [libras] de cocaína: de cada 10 envíos, al menos ocho pasaban por manos de Pannunzi”, según el general, mientras agentes del orden público y fiscales italianos se alegraban por su captura.

Pannunzi, de 67 años, ha escapado dos veces de su detención en Italia, entre ellas una en 2010 cuando estaba en un hospital en Roma.

El fiscal italiano Nicola Gratteri dijo a la prensa en Italia que Colombia había aceptado expulsar a Pannunzi y que se esperaba que el vuelo en que viajaba el narcotraficante aterrizara en Roma ayer sá bado por la noche.

Según la policía colombiana, Pannuzzi llegó en barco a Brasil al escapar de Roma y luego cruzó por tierra a Venezuela y Colombia.

El convicto narcotraficante se movía entre los tres países, llevaba una vida discreta y venía trabajando en el negocio de los narcóticos desde la época del ya desaparecido cártel de Medellín, cuyo máximo jefe Pablo Escobar fue abatido por la policía en Medellín en diciembre de 1993.

Pannunzi, de estatura corta y cuadrada y cara redonda, se libró dos veces de ser detenido en Italia, incluyendo la fuga del 2010 de un hospital en Roma, donde fue ingresado tras indicar a las autoridades que se sentía mal. En 1999 Pannunzi escapó de otra clínica italiana mientras se encontraba bajo arresto domiciliario que le fue otorgado por motivos de salud. Finalmente fue detenido en Madrid en el 2004.

Cuando las autoridades colombianas e italianas lo capturaron en Bogotá, Pannunzi, quizá nuevamente confiado en recibir un tratamiento benigno, les dijo que se sentía enfermo, dijo Gratteri según los despachos.

Pannunzi lleva fama de ser el jefe de la banda delictiva “ndrangheta” una organización con sede en Calabria, en el sur de Italia, y según los investigadores italianos eclipsó en poderío e influencia a la Cosa Nostra de Sicilia gracias a su agresividad para dominar el tráfico de cocaína procedente de Colombia.

Gratteri indicó que Pannunzi tenía tanta influencia como narcotraficante “que era el único capaz de vender exitosamente [cocaína] tanto a la ‘ndrangheta’ como a la Cosa Nostra”.

“Es sin duda el narcotraficante más poderoso del mundo”, dijo Gratteri, según los despachos de prensa.

Pannuzi era “un pez gordo” y también negociaba con heroína, dijo en conferencia de prensa el general José Roberto León, director de la policía nacional colombiana.

El mafioso debe cumplir una condena de 12 años y medio de cárcel en Italia.

Pannuzi fue deportado porque es el acuerdo que rige entre Italia y Colombia debido a su documentación falsa.

Aunque las autoridades colombianas conocían de las actividades de Pannuzi desde hace tiempo, fue a comienzos de este año cuando obtuvieron una buena pista cuando, al viajar a Italia en busca de otro narco, un colombiano, supieron que el italiano se movía entre Colombia y Venezuela y estaría en Bogotá.

Gratteri calificó a Pannunzi de ser el “importador de cocaína más grande” del mundo, al haber organizado compras de 3.5 toneladas de cocaína a la vez.