Reforma no se vota
Presidente de Cámara descarta acercamiento con el Senado
WASHINGTON, D. C. El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, dejó claro nuevamente ayer que su bancada no participará en una negociación bicameral con el Senado sobre la reforma migratoria.
“La idea de que vamos a votar un proyecto de ley de 1,300 páginas que nadie jamás leyó, que fue lo que hizo el Senado, no va a suceder en la Cámara de Representantes”, dijo Boehner durante una rueda de prensa.
“Francamente, lo dejaré claro: no tenemos intención de asistir a la conferencia (bicameral) con el proyecto de ley del Senado”, subrayó Boehner, reiterando su conocida postura sobre este espinoso asunto.
Boehner se refería al proceso legislativo mediante el cual las dos cámaras del Congreso tienen que armonizar en un solo texto sus distintas versiones de un proyecto de ley para luego proceder a un voto definitivo.
Apenas unas horas antes antes las jóvenes Carmen Lima, de 13 años y Jennifer Martínez, de 16, apelaron a Boehner sobre la separación de familias que causa la actual política de deportaciones.
“Estoy tratando de lograr eso No va a ser fácil, no es un camino fácil. Pero he dejado en claro desde el primer día, después de la elección, que es hora de hacerlo”, dijo Boehner mientras se alistaba a comer en Pete’s Diner, en Washington D.C.
“¿Cómo se sentiría si tuviera que decirle a su hijo de 10 años que ya no va a volver a casa?”, le preguntó Carmen, residente de California. “Eso no sería bueno”, respondió Boehner, vestido de manera informal y con una gorra de beisbolista.
Las dos jóvenes se condujeron con Boehner de manera cortés y él les dio las gracias en señal de despedida.
El intercambio fue grabado por la organización FIRM (Movimiento por una Reforma Migratoria Justa).
El Senado aprobó en junio pasado una reforma migratoria integral que permite la legalización de la población indocumentada, en una votación de 68-32, pero la Cámara Baja, controlada por los republicanos, aún no ha sometido una ley similar alguna a votación en el pleno.
En declaraciones a La Opinión, dos fuentes republicanas de la Cámara Baja, que pidieron el anonimato, coincidieron en que las palabras de Boehner solo reflejan la dificultad de una estrategia consensuada.
Agregaron que la reforma “no está muerta”, como indican algunos, aunque queda mucho camino que recorrer para que sea sometida a voto.