La segregación escolar
Hace 60 años una decisión judicial eliminó la segregación racial en las escuelas, dio fin a la falsa idea aplicada por décadas de que se podía separar a los alumnos por su raza, brindando una enseñanza “igual pero separada”. Hoy la segregación legal en las escuelas es una cuestión del pasado, pero la integración permanece todavía como una meta esquiva.
El 17 de mayo de 1954 es una fecha clave de nuestra historia cuando la Suprema Corte de Justicia eliminó por unanimidad la separación racial en las escuelas con el fallo Brown vs. Junta de Educación. Hasta ese día había 17 estados que exigían una separación física por raza de los alumnos mientras que otros lo dejaban a la discreción de su Junta Escolar.
Desde entonces se ha intentado numerosas maneras de integrar las escuelas, en muchos casos trasladando los alumnos en autobuses a escuelas más lejanas para formar un estudiantado más diverso, lo cual levantó muchas críticas en su momento.
Pese a todos los esfuerzos, la segregación escolar hoy continua, ya no en el sur de la nación sino en sus grandes centros urbanos como Nueva York y Los Ángeles.
No son leyes las que ahora mantienen a los alumnos en escuelas con un estudiantado mayormente latino, afroamericano o blanco. La situación económica de las familias de los alumnos, los patrones locales de vivienda y la huida de la clase media a los suburbios crearon una segregación de hecho.
Las escuelas también sufrieron de esta dislocación, ya que la diferencia de recursos, hasta la calidad de maestros, suele ser más baja en escuelas donde casi todos los alumnos son de minoría.
Los fondos adicionales propuestos por el gobernador Brown para las escuelas con mayor necesidad es un buen paso. Ahora son los distritos escolares, como el LAUSD los que deben escuchar a los padres en la distribución de fondos.
Hace 60 años la segregación racial fue derrotada con un fallo judicial, hoy es mas complejo requiriendo un esfuerzo de toda la sociedad.