EEUU: abusos de menores no acompañados son “casos aislados”
HHS tiene bajo su custodia a 5,300 niños no acompañados y prevé ampliar instalaciones temporales para los menores
WASHINGTON.- El Gobierno de EEUU defendió este martes las medidas que ha tomado para resguardar la seguridad de los menores no acompañados bajo custodia del Departamento de Salud, y afirmó que los casos de abuso en hogares temporales son “casos aislados” a manos de “malos actores”.
La Administración Obama se encontró hoy a la defensiva tras una investigación de la agencia de noticias Associated Press, que ayer reveló incidentes en los que algunos niños migrantes colocados en hogares temporales fueron sometidos a abuso sexual, privación de alimentos y hasta tráfico de menores.
Según la investigación, estos incidentes coincidieron con el auge de la llegada de miles de niños no acompañados de Centroamérica a la frontera sur de EEUU, que presuntamente obligó a las autoridades del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) a relajar sus normas de seguridad para así acelerar el traslado de los niños de albergues a arreglos de vivienda más permanentes.
El HHS dijo a este diario que, en la actualidad, tiene bajo su custodia a un total de 5,300 niños en los albergues administrados o bajo contrato de la agencia federal, donde tienen una estancia promedio de 32 días antes de ser trasladados a hogares de patrocinadores, o entregados a sus padres.
Un comité del Senado realizará una audiencia el próximo jueves para examinar los retos que afronta el gobierno para responder al continuo flujo de niños centroamericanos.
Gobierno responde a denuncias
En entrevista con este diario, una funcionaria de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados del HHS, Andrea Helling, insistió hoy en que el reportaje contiene algunos “agujeros” porque no describe todo el panorama del complejo proceso para la colocación de los menores en casas de “patrocinadores”.
“Cuando los niños pasan a nuestra custodia en la Oficina de Reasentamiento de Refugiados, trabajamos muy duro para resguardar su seguridad y ofrecerles cuidado, y por eso es que el Departamento de Salud y Servicios Humanos tiene custodia de los niños”, dijo Helling.
“Algunas veces, ocurren casos de fraude humano o surgen malos actores, pero nosotros trabajamos constantemente para mejorar nuestros mecanismos, porque es una tragedia cuando esto ocurre”, enfatizó Helling, quien aseguró que HHS sólo entrega a los niños cuando se ha cerciorado de que éstos irán a lugares seguros donde recibirán un buen cuidado.
Esos mecanismos incluyen una exhaustiva revisión de las solicitudes, y más inspecciones de los hogares donde vivirán los menores.
Además, desde el año pasado, las autoridades dan seguimiento a los niños una vez que son colocados en los hogares, y si surgen problemas, los trasladan a otro sitio si es necesario.
Así, punto por punto, Helling contestó a las denuncias de la investigación, y aseguró que HHS tiene una larga lista de requisitos y exige prueba de identidad de toda persona que se ofrezca a alojar a un menor en su casa.
Esa lista en el proceso de admisión como patrocinador del programa incluye la presentación de documentos oficiales, incluyendo actas de nacimiento y licencia de matrimonio, antes de que el HHS entregue a un menor a su custodia.
El HHS, continuó, sólo exige huellas digitales a personas que no son los padres o no tienen la custodia legal del menor, así sean tíos, abuelos, primos o amigos de la familia.
Preguntada sobre qué medidas se tomarán contra los “malos actores” implicados en los abusos de menores, Helling dijo que es una situación “difícil” porque AP no ha querido proporcionar al HHS los nombres de los afectados.
Helling hizo esas declaraciones en unos momentos en que la agencia federal está solicitando que la base aérea Holloman en Alamogordo (Nuevo México) acomode en sus instalaciones a hasta 700 niños no acompañados.
Según Helling, la base tiene capacidad para 250 niños, pero existen planes para expandir la capacidad hasta 700, además de que el HHS prevé otras abrir instalaciones temporales, incluyendo en un sitio de Job Corps en Homestead (Florida), y un edificio federal en Denver (Colorado).
Datos oficiales de la Patrulla Fronteriza señalan que 17,370 menores, la mayoría de Centroamérica, fueron detenidos entre octubre y diciembre de 2015.
Helling dijo que el HHS ha habilitado la línea telefónica gratuita (800) 203-7001 para recibir quejas sobre el trato que reciben los menores.