Víctimas de la masacre en Orlando reciben apoyo solidario de la comunidad latina
Mientras familias de las víctimas del brutal ataque en el club Pulse sufren y tratan de comprender la tragedia, la comunidad hispana de Orlando se ha unido para asistirlas con solidaridad y recursos
Empresarios, líderes religiosos, funcionarios públicos, políticos, activistas, organizaciones cívicas y habitantes de Orlando expresaron su dolor y se dijeron decididos a actuar de inmediato para asistir a la comunidad, y sobre todo a las familias de las víctimas, muchas de ellas puertorriqueñas, de la terrible tragedia que ha enlutado a Orlando.
En tanto, en las inmediaciones del Beardall Senior Center ubicado en Delaney, Orlando, la prensa se aglomeraba para tratar de hablar con las familias de las víctimas. Al menos 49 muertos y 53 heridos es el saldo de la atroz masacre perpetrada en el club nocturno gay Pulse la madrugada del domingo 12 de junio, el mayor tiroteo masivo en la historia de Estados Unidos, que ha enlutado a la ciudad mágica de Orlando.
Tony Soto, instructor de zumba reconocido en Orlando, de origen boricua, fue una de las personas que salieron escoltadas del edificio de Delaney. Él se limitó a decir “necesitamos oración, no más odio, no más odio”. Lucía desconsolado tras haber perdido a un amigo en esta masacre.
Precisamente, Rosalía Ramos, madre de Stanley Almodóvar III, de 23 años, con voz entrecortada relató que su hijo murió en el ataque y qué aún no entiende cómo las autoridades no pudieron dar seguimiento al atacante para quizás prevenir esta terrible tragedia.
“Por qué no pararon esto antes, si había textos de este tipo diciendo sus intenciones. Esto tiene que ser racismo, odio, no lo sé, pero mi muchacho era bueno, le gustaba salir con sus amigos y amigas. A ese club no solo iban gays, iban muchachas que no eran gay”, dijo esta madre que reside en Clermont, criada en Puerto Rico y nacida en New Jersey.
Se ha afirmado que Omar Mateen, el autor del atentado, fue sido investigado tiempo atrás por el FBI pero su caso fue cerrado al no detectarle en su momento una intención violenta concreta o nexos con terroristas que hicieran pensar que era un individuo de riesgo.
Solidaridad de la comunidad hispana
Por otra parte, desde muy temprano en la mañana de este lunes 13 de junio se reunieron empresarios y líderes en la sede de la Cámara Hispana de Comercio de Metro Orlando, (HCCMO, por sus siglas en inglés) con sentimientos a flor de piel y con el propósito de unir esfuerzos.
“La familia de la Cámara Hispana de Comercio de Metro Orlando ha estado conectada desde las primeras horas de la mañana tratando de encontrar sentido dentro de este acto atroz. Estamos afligidos por el dolor, al igual que el resto de la comunidad; enfurecidos al igual que el resto del mundo; con un sentido de impotencia tal como muchas familias que han perdido a sus seres queridos; simplemente tristes y acongojados. Pero no podemos dejar que la violencia y el odio definan lo que somos. Necesitamos encontrar maneras productivas para canalizar nuestra ira y centrarnos en encontrar soluciones”, expresó Diana Bolívar, presidenta del HCCMO.
Luego, en horas de la tarde, se realizó un encuentro con presencia de más de 10 organizaciones, políticos locales, líderes sociales y el activista de la comunidad LGBT, Pedro Julio Serrano, director de Puerto Rico para Tod@s.
“El amor es más fuerte que el odio. No vamos a vivir en miedo, aun aquellos que hemos sido atacados por nuestra orientación sexual o nuestra identidad de género, y que hemos vivido el discrimen. He tenido rifles apuntando a mi cara, como el rifle que fue utilizado este domingo, pero estoy aquí y esas 50 vidas ya no están. Es por eso que nosotros tenemos que buscar el amor, la solidaridad, la empatía y entender que todos somos seres humanos”, expresó Serrano.
En esta reunión se anunció la formación de la organización Somos Orlando, una alianza de varias organizaciones en conjunto con gobiernos locales para facilitar la ayuda bilingüe y efectiva a la comunidad hispana, dado que la mayoría de las familias afectadas por el atentado son latinas y requieren urgentemente esa asistencia.
“Nos enteramos de este acto de brutalidad, y esto impactó a toda la comunidad de Orlando, a la comunidad hispana, a la comunidad gay. Varias líderes nos reunimos inicialmente y poco a poco se han unido más, esto es representativo de la unidad, de que nos importa, de que somos todos una familia. No había visto antes una unidad así”, destacó entre lágrimas la empresaria Sami Haiman-Marrero.
Esta organización, 1ue lanzó la página web www.somosorlando.info, ofrecerá ayuda gratuita a todas las familias que lo requieran, y sus servicios incluyen abogados, terapistas, intérpretes, traductores y profesionales para preparación de los trámites funerales, entre otros. Todos son voluntarios comprometidos en esta misión.
En la ciudad de Kissimmee, vecina de Orlando, varios líderes de iglesias de la Florida Central se unieron en oración y conformaron un comité para asistir con consejería gratuita a las familias de las víctimas y crearon un fondo para ayudar con gastos de entierro.
“Estamos viendo el rostro del dolor, este no es un momento para teología, ni para hablar si son hispanos o gays, es una oportunidad para ayudar a los familiares”, dijo el obispo Ángel Marcial Estades, presidente de la Fraternidad de Concilios Evangélicos del sureste de Florida (FRACEV).