Ejecutan a Orlando Hall: Corte Suprema despejó la vía para la octava ejecución federal de 2020
El jueves se ejecutó a Orlando Hall, un hombre condenado por secuestrar y violar a Lisa Rene, una niña de Texas de 16 años, golpearla con una pala y enterrarla viva
Penitenciaría Federal de Estados Unidos en Terre, Haute, Indiana. Crédito: Scott Olson | Getty Images
La octava pena de muerte federal se ejecutó finalmente en la noche del jueves en el penal de Terre Haute, en Indiana.
Orlando Hall, de 49 años, fue ejecutado a las 11:47 pm., después de recibir una inyección letal en el complejo penitenciario federal en Terre Haute, Indiana, reportó el periodista Jordan Kudisch de la emisora local de Indiana WTHI-TV10, que fue testigo de la ejecución.
Orlando Hall has been executed at the federal prison in Terre Haute, making him the eighth person put to death by this year.
— WTHI News10 (@WTHITV) November 20, 2020
Hall fue condenado por secuestrar y violar a una niña de Texas de 16 años, rociarla con gasolina y enterrarla viva.
Sus abogados interpusieron recientemente una última demanda para detener la ejecución.
Las apelaciones judiciales tardías de su defensa argumentaron que los prejuicios influyeron en su sentencia de muerte. Hall es negro, y su sentencia fue recomendada por un jurado compuesto exclusivamente por blancos. Sus abogados también sostienen que las restricciones y preocupaciones relacionadas con la pandemia de COVID-19 han limitado su capacidad para ayudarlo.
La jueza de distrito de Estados Unidos, Tanya Chutkan, ordenó que la ejecución debía posponerse mientras el tribunal sopesaba las cuestiones planteadas por los abogados de Hall.
Menos de una hora después de que se dictó esta orden, el Departamento de Justicia presentó una apelación inmediata ante un tribunal federal de apelaciones en Washington.
Según The Associated Press, la Corte Suprema de Estados Unidos despejó el camino para permitir que el gobierno federal continuara con la ejecución de Hall.
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La descripción del crimen del Departamento de Justicia
El fiscal general William P. Barr ordenó a la Oficina Federal de Prisiones que se programara la ejecución de Orlando Cordia Hall para el 19 de noviembre de 2020.
En septiembre de 1994, Hall y varios cómplices llevaron a cabo una operación de tráfico de marihuana en Pine Bluff, Arkansas.
Después de una transacción fallida de drogas que involucró $4,700 dólares, Hall y sus cómplices fueron a la casa de de un hombre que creían que había renegado del trato, en Arlington, Texas.
La hermana de 16 años del hombre, Lisa Rene, abrió la puerta. Aunque ella era simplemente una espectadora inocente, Hall y sus cómplices la secuestraron a punta de pistola y Hall la violó en el coche.
Posteriormente, los cómplices de Hall la llevaron a un motel en Arkansas, donde la violaron varias veces más. Hall y sus cómplices luego la llevaron a un parque donde habían cavado una tumba. Allí, la golpearon en la cabeza con una pala, la empaparon con gasolina y la enterraron viva.
Un médico forense determinó que Lisa Rene aún estaba viva cuando fue enterrada y murió por asfixia en la tumba, donde fue encontrada ocho días después.
En octubre de 1995, un jurado del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Norte de Texas declaró a Hall culpable, entre otros delitos, de secuestro con resultado de muerte y recomendó por unanimidad la pena de muerte, que el tribunal impuso.
Las condenas y sentencias de Hall fueron confirmadas en apelación hace más de 20 años, y su ronda inicial de impugnaciones colaterales fracasó hace casi 15 años.
