COVID-19 agrava salud mental: más personas quieren morir

La pandemia de COVID-19 ha intensificado los problemas de salud mental, la depresión, la ansiedad, el estrés y las ganas de no seguir viviendo, dijeron expertos del condado de Los Ángeles. Sin embargo, también pidieron a los angelinos aprovechar los recursos de salud que tienen disponibles sin importar el estatus migratorio.

Durante la videoconferencia “Conociendo las necesidades de cuidado de salud en la pandemia”, organizada por Ethnic Media Services, Miriam Brown, subdirectora del Departamento de Salud Mental (DMH), habló del impacto del coronavirus en la salud mental

“Lo que hemos visto es que hay más personas que están llamando a nuestra línea, diciendo que se quieren morir. No tenemos datos sobre los suicidios, pero sabemos que quienes pasan por depresión, ansiedad, miedo y falta de ganas de seguir adelante es porque no se están conectando con otros”.

El impacto de COVID no solo es a nivel profesional sino personal. “Todos tenemos que lidiar con muchas cosas en el trabajo y en la casa. Los niños con una manera nueva de aprendizaje sin interactuar con sus amigos; las madres y padres sobre cómo volverse profesores y asistir a sus hijos en el hogar. Eso causa mucho estrés”.

También dijo que ha aumentado el número de personas que usan drogas y alcohol. “El problema es que en nuestras comunidades, la salud mental se ve como un estigma. Les pido que nos llamen porque sin salud mental no podemos funcionar y trabajar”.

Algunos de los síntomas que se observan como consecuencia del impacto de COVID en la salud mental es sentirnos tristes. 

“Estamos sintiendo un miedo que no teníamos antes. El temor de que algo pase. Puede que la gente esté durmiendo más o tomando más. Quiero animarlos a que busquen nuestros servicios de salud mental. Los tenemos en todos los idiomas”.

Hizo ver que estamos pasando por el peor momento de la pandemia en el condado de Los Ángeles. “La salud mental de los niños puede que también se sienta afectada”.

Pero observó que es difícil precisar porque hay menos llamadas de ayuda para niños y niñas. “Las escuelas antes podían identificar cuando tenían un problema, pero como los menores no están asistiendo a clases, no se sabe qué está pasando realmente, pero el condado también ofrece servicios para ellos”.

Además de todo, hay muchas personas que han perdido el contacto con sus terapistas y proveedores de salud por COVID-19. “El Departamento de Salud Mental está ofreciendo los servicios de manera limitada en persona; pero tienen la opción de la tele salud para minimizar cualquier tipo de exposición al COVID. La línea a la que pueden llamar es: 1-800-854-7771 para tener servicio por teléfono”.

Opción para desempleados

Sherri Cheatham, jefa del programa de Servicios de Apoyo en el Hogar y Medical del Departamento de Servicios Sociales (DPSS), dijo que debido a la pandemia, se han encontrado con un número récord de personas que están sin empleo; o cuyo salario ha bajado debido a que sus horas se han reducido. “Debido a eso, pueden haber pedido su cobertura de salud; y Medi-Cal puede ser una opción que nunca habían considerado”.

Como consecuencia, han ampliado sus esfuerzos para que la gente sepa de la disponibilidad de Medi-Cal para sus necesidades de salud y hacerse evaluaciones de COVID. “Hemos tenido que cerrar los servicios en persona, pero por teléfono los atendemos; y tenemos más horas de atención de 7:30 a.m. a 7:30 p.m.  de lunes a viernes; y los sábados de 8 a.m. a 4 p.m.”

Los servicios de apoyo en la casa se siguen ofreciendo a menos que alguien tenga COVID. “Quienes necesitan cuidado en el hogar no se quedan sin el servicio, los proveedores siguen yendo a las casas. Pero se trata primero de obtener toda la información de manera virtual”.

Un programa muy latino

Anna Gorman, directora de Alianzas y Programas Comunitarios del Departamento de Servicios Sociales del condado de Los Ángeles, recordó que el programa My Health LA del condado es para personas de bajos ingresos sin seguro médico, mayores de 26 años, sin importar el estatus migratorio. “El 92% de los beneficiados son hispanos; y el 60% son mujeres”.

Añadió que ellos le pagan a las clínicas comunitarias para que los atiendan. “El programa les da una tarjeta para que la presenten a la hora de recibir los servicios de salud”.

Gorman dijo que un programa como My Health LA es muy importante durante la pandemia porque si tienen un problema de salud pública saben a dónde ir. “Hemos tenido una baja, quizá porque no están yendo a las clínicas, pero la gente puede inscribirse o hacer una renovación por teléfono, y se están haciendo citas también por ese medio”.

En materia de salud mental, dio a conocer que han recibido 5 millones de dólares para dar servicios de prevención mental que ayuden a las personas a lidiar con la pérdida de un familiar o los estragos del desempleo, y otros problemas relacionados con el coronavirus.